Que la vida de Gustavo González no es fácil desde que entró a formar parte del universo Sálvame parece algo más que claro. Todos los espectadores del programa estrella de Telecinco fueron testigos de su llegada a este canal de Mediaset y de su caída en desgracia. Todos le vieron llorando por perder su matrimonio (la mujer con la que había tenido sus hijos) cuando se descubrió que había mantenido una relación con María Lapiedra. Pero el llanto dio paso a la sonrisa y al dinero: se le ofrecieron grandes cantidades de dinero por contar su vida y por hacer público su drama. Y la semana pasada, cuando ya parecía que nada podía ir peor… a Gustavo se le volvió a torcer todo.
La Policía acabó entrando en Sálvame para hablar con él. El suceso tuvo lugar el pasado viernes. El presentador del programa (que ese día era el ex concursante de Gran Hermano Kiko Hernández), llegó incluso a parar el programa para advertir de que una patrulla de agentes del Cuerpo Nacional de Policia estaban en las puertas de la televisión de Fuencarral. Iban a buscar a Gustavo González. “¿Acabará Gustavo en la trena?”, se llegó a preguntar (no sin ciertas dosis de humor) el propio Twitter de Telecinco. Al final, como casi todos los cebos, todo quedó en un “bluff”. Lo único que querían los agentes era entregarle una notificación al periodista (muy conocido desde hace años por su participación en programas de Antena 3 como Donde Estás Corazón que llegó a competir con Sálvame).
No es raro que uno de estos colaboradores de la llamada prensa del corazón acabe ante los tribunales. Pasa prácticamente todos los meses. Por eso Sálvame pudo tirar poco más de la presencia de la Policía en Mediaset. Pero lo mejor para ellos es que ahí no había acabado el “linchamiento” público de Gustavo. El propio presentador del programa tenía una bala guardada contra él que disparó cuando acabó el programa el viernes pero que sin duda dará mucho que hablar toda esta semana.
Una semana complicada
A lo largo de los próximos días está previsto que Hernández luche sin piedad contra González en plató. ¿La razón? El periodista está acusado de intentar vender la vida de su compañero y presentador. “Es un traidor”, llegaron decir muchos de sus compañeros. Peo vayamos por partes. Además de la cita judicial a la que ya aludimos a Gustavo le esperan otras "citas" a partir de la mañana con sus compañeros.
La noticia
La bomba que esta semana hará sufrir a Gustavo González saltó al principio del programa del pasado viernes. Fue entonces cuando Hernández anunció que había una persona que le había seguido a su casa y había vendido unas fotos suyas. Evidentemente no dio el nombre al principio del programa no vaya a ser que la gente apague la tele. Lo confesó al final: el traidor había sido Gustavo González. “Ya hablaremos el lunes”, le dijo Herández a González (la que le espera esta semana).
El periodista ya avanzó su defensa. Aseguró que vender fotos era su trabajo y que tenía la “conciencia muy tranquila”. Veremos. De momento el pasado viernes Hernández le echó del plató. Y eso era sólo el principio.
