Dicen desde La Sexta que el caso del Anou, un restaurante situado en pleno centro de Valencia, fue el que más frustró a Alberto Chicote. El chef que cada semana trata de dar una nueva vida a los restaurantes que atraviesan un mal momento pasó por este establecimiento el año 2013. El programa aún no se había asentado como ahora (que ya lleva cinco temporadas y está confirmado que el año que viene emitirá la sexta) pero ya empezaba a coger cierta fama. Por eso la visita de Chicote despertó expectación. Y no era para menos. Los encontronazos con los trabajadores del local fueron constantes. A Chicote le costó tanto reflotarlo que el propio cocinero decidió volver meses después a ver qué había sido de la vida de los dueños del local. Y se fue con una sonrisa porque en el segundo programa emitido desde este establecimiento se puede ver cómo los cambios introducidos por Chicote habían tenido éxito. Pero ¿qué dicen ahora mismo los clientes?

Nada más llegar al local Chicote recibió lo que se define como "la primera en la frente". La cocinera le dijo que ella hacía "cocina de intuición, vamos que cocinaba lo que le daba la gana. El cocinero llegó a definir a la propietaria y chef del local como una mujer con el ego "tan grande como el estadio de Mestalla", "cero experiencia" y con "ínfulas de grandeza". Pero para ver qué opinan realmente los clientes a día de hoy y cómo está la situación lo mejor es mirar qué dicen quienes han ido como comensales. Como adelanto: parece que la cosa no ha cambiado mucho y que el ego de la cocinera sigue revoloteando demasiado por el local.

Los clientes, divididos

En una de las web de opiniones de locales de hostelería más utilizadas, Tripadvisor, los clientes han dejado 126 opiniones. Y están divididos casi a la mitad. En los extremos 39 dicen que la experiencia ha sido excelente mientras que 26 lo califican de pésimo. Entre medias hay de todo. "Yo no lo conocía, me dijeron que era famoso pero no vuelvo a ir. La cocinera era una prepotente", asegura el último comensal que ha dejado una opinión. "Ni el trato con el cliente es agradable ni se percibe un ápice de humildad", sentenció otro. "El servicio es muy bueno por parte de los camareros que nos atendieron excelente e intentaron explicar que cocina trabajan. Pero la cocina de cocas no son cocas ni nada, es una tomadura de pelo de una chef que se piensa que su concepto es el adecuado cuando es una farsa de cocina. Que se dedique a lo que hacía que era comida para llevar. No volvería ni aunque me pagaran por ello", asegura un cliente que acudió al local el pasado mes de julio.

Hay quién incluso acudió al restaurante después de ver lo que había hecho Chicote en su programa. "De visita en Valencia le di la oportunidad a este restaurante después de ver Pesadilla en la Cocina y fue una gran decepción. La calidad de los alimentos brillaba por su ausencia, además el cocinado parecía que lo hubieran elaborado hace cinco años. Pregunto por la cocinera y que me pudiera explicar tal desastre y su excusa fue que no sabía valorar una comida como la que preparaba, que no volviera por ahí. Una basura de comida y una propietaria egocéntrica, narcisista e incomprensible como chef", resume otro cliente que desde luego no va a volver al local justo antes de otro que dice haber salido "muy contento". "Fuimos por conocerlo del gracioso capítulo de Chicote y salimos muy contentos, la paella riquísima, el local es muy agradable", sentencia.