Una de las cosas que más valoran los espectadores de Boom (el formato de las tardes de Antena 3) es, sin duda, la capacidad que ofrece el programa de conocer un poco mejor a sus concursantes en los pequeños diálogos que el presentador del formato entabla con los participantes en el concurso entre pregunta y pregunta. Eso es, de hecho, lo que permitió hace meses que Los Lobos se colaran cada tarde en cientos de casas y que conquisten el corazón de los espectadores llevando al formato a niveles de audiencia nunca antes vistos. De hecho aún hay momentos vividos con estos cuatro amigos que muchos recuerdan. Uno de los días de más audiencia del formato el encargado de contar la historia que emocionó a los espectadores fue Erundino Alonso.

Este ingeniero de montes que trabaja actualmente en Castilla La Mancha es también muy aficionado a la montaña y aprovechó la visita al programa de Antena 3 de unas contrincantes de la zona de Palencia Alonso para contar su experiencia subiendo el Curavacas. "Estaba en una plaza en el pueblo que hay antes del monte y me reconocieron por la voz. Nos encontramos con un señor de la zona que resulta que era muy fan del programa y se ofreció a subir con nosotros", contó Alonso. Lo que por entonces no sabía este concursante de televisión es que tras el palentino se escondía una historia más que triste.

"Nos contó que él había tenido dos hijos hacía años. Se llamaban Juanjo y David y habían muerto durante un alud en ese mismo monte. A pesar de todo lo que había tenido que vivir este hombre le guardaba rencor a la montaña y de hecho cuando tuvo que afrontar una noticia tan dura como la muerte de dos hijos hizo la promesa de que iba a subir al monte 100 veces en homenaje a ellos", continuó Alonso ante un público más que emocionado por la historia. El protagonista de este relato, Luis, ya había subido 98 veces. La 99 la completó con el miembro de Los Lobos de Boom y uno de sus acompañantes. La historia no pasó desapercibda en redes sociales en donde muchos destacaron la calidad humana tanto de Erundino como del protagonista de esta historia trágica pero que a la vez demostraba la superación de este vecino de Palencia que había tenido que soportar la pérdida de dos hijos y que se había armado de valor para enfrentarse en un centenar de ocasiones al monte que les robó a los jóvenes.