Si hay algo que ya no discute prácticamente ninguna seguidora de telenovelas (la mayor parte de los espectadores de este tipo de ficciones son mujeres), es que hay un nombre propio que destaca por encima de cualquier otro en estas producciones: el del actor turco Can Yaman, el protagonista de Erkenci Kus, la novela que hace meses arrasó en audiencia en España y que conquistó a miles de espectadoras. El protagonista de esta ficción es tan conocido en todo el mundo que ha conseguido arrasar en redes sociales. Tanto que en Instagram ya acumula más de ocho millones de seguidores que le observan a cada paso y que siguen su día a día o al menos la parte de su vida privada que el actor quiere compartir con sus fans.

Un ejemplo de ello es el vídeo que el actor colgó en su perfil de Instagram en el que se le ve entrenando antes de rodar la serie sobre Sandokan. El vídeo, que no ha pasado desapercibido para casi nadie, acumula más de un millón de reproducciones y miles de comentarios.

Can Yaman es una de las demostraciones de que las telenovelas turcas han llegado para quedarse. En los últimos años han sido varias las producciones de este tipo que han triunfado en nuestro país y en varios países de nuestro entorno. La primera que tuvo éxito entr el público fue Kara Sevda. Pero poco a poco las espectadoras se fueron rindiendo ante Erkenci Kus.

Los hijos y las hijas de quienes seguían los culebrones latinos que se emitían a la hora de comer hace años en la televisión en abierto en España siguen ahora las producciones turcas. Lo cierto es que las historias son siempre las mismas. Se trata de amores prohibidos entre personas que normalmente pertenecen a clases sociales distintas y que tratan de sacar adelante su relación.

Lo que ha cambiado en buena medida es la forma en la que se ven este tipo de producciones. Si bien siguen teniendo mucho público "lineal" (el que sigue las series a través de los canales tradicionales), muchos han optado ya por seguir sus novelas favoritas a través de los servicios a la carta que ofrecen las diferentes plataformas. Los cambios de horario han hecho que muchos espectadores cambien también el modo en el que ven las series.