Si hay algo que parece claro en el mundo de la televisión actual, y poco está claro en este mundillo, es que los concursos en televisión triunfan. En un momento en el que casi todas las series y películas se ven "online" las dos principales cadenas en España (Antena 3 y Telecinco en el mundo de las privadas) han hecho de los concursos y los realitys sus programas estrella. En el caso de Atresmedia ha sido sin duda el éxito de Pasapalabra o ¡Boom! el que ha elevado a máximos casi históricos (al menos que no se veían desde hace meses) a la cadena. Y el éxito aún puede mejorar.

Lo cierto es que la llegada de Pasapalabra a Antena 3 hizo que cambiaran de hora todos los concursos de la tarde. Se sabía que ¡Boom! iba a dejar de emitirse justo antes del informativo de Vicente Vallés pero todos teníamos más o menos claro que no desaparecería. Otra cosa es lo que iba a pasar con Ahora Caigo. Aunque Arturo Valls es muy conocido y querido por el público parecía que era el formato que más "pinta" tenía de caerse. Pero no lo hizo. Sobrevivió y eso que se emite en una hora, en medio de Sálvame como buque insignia en Telecinco, muy complicada para la audiencia.

Sin embargo poco a poco el programa ha perdido un atractivo que desde hace dos meses se trató de recuperar introduciendo pequeños cambios para hacer la mecánica diferente y que los que estaban al otro lado de la pantalla no cayeran en el aburrimiento (no hay que olvidar que en Antena 3 entre la Ruleta, ¡Boom!, Pasapalabra y Ahora Caigo se emiten hasta cuatro concursos al día).

Sin embargo los cambios no han gustado a casi nadie. Al menos así lo han dicho los espectadores que han contestado en Twitter. "Os habéis cargado el programa", llegaron a decir algunos de los más críticos a los que el programa, eso sí, ha contestado pidiendo disculpas.

Con la boca abierta

Los concursos de la televisión son un gran caladero para los que lo quieren pasar bien. Hace un tiempo, una gijonesa no dudo en ponerse a bailar delante de las cámaras. Se trata de la propietaria de una conocida confitería situada en el barrio de El LlanoAinhoa es su nombre, aunque en realidad fue bautizada con otro, el de Covadonga.

La presentación de la gijonesa no dejó a nadie indiferente. Lo primero que hizo fue descubrir lo que llevaba. "He traído atrezzo, porque si no€". Fue entonces cuando el conductor del programa la invió a acercarse al centro del escenario, "ven para aquí que, sino no te vemos todos", dijo Valls, a lo que la gijonesa respondió "¡que me vengo arriba, eh!". Y dicho y hecho. La asturiana se acercó al presentador valenciano y tras enroscarse en un tul de color rosa y pedir música comenzó su baile. "¿Necesitas palmas?", le preguntó Arturo Valls, a lo que Ainhoa respondió jocosamente, "palmas no, que yo no soy sevillana", lo que despertó las carcajadas del pública.

La pastelera gijonesa cogió el toro por los cuernos y pidió un ritmo a la gente que estaba en la grada, "dun, dac, dun, dun, dac" y fue ahí donde comenzó su baile y cuando se llevó los aplausos del resto de concursantes. "Me has recordado un poco a Shakira", le dijo Arturo Valls.

A la pregunta de "qué vas a hacer con el dinero", Ainhoa lo tenía claro. "Pues me llevaré a mi marido y a mi hijo de siete años, me hace mucha ilusión ir a la polinesia francesa, a bailar las danzas tahitianas. Yo no se si quieren ir o no, pero yo me los llevo. Yo lo pago y yo digo a donde vamos", dijo la gijonesa entre las risas del público.

Y no le fue mal durante el concurso puesto que se llevó una gran suma de dinero. Falló una pregunta en teoría fácil, "¿qué jugador del Real Madrid es la actual pareja de Sara Sálamo?". La respuesta era Isco, pero no acertó a responder correctamente. Pese a ese fallo la pastelera de El Llano se lleva para Gijón la nada despreciable cifra de 18.502 euros. Como curiosidad y como apuntaron varios telespectadores, el nombre de la gijonesa no estaba bien escrito en su solapa. No acertaron a escribir correctamente Ainhoa, ni Covadonga.