No solamente ha hablado Rocío Carrasco del episodio traumático con su hija, Rocío Flores, sino que ha contestado a todo lo que durante años han dicho de ella en los platós de televisión. En concreto con lo que ha dicho Gustavo González y Kiko Matamoros a favor de Antonio David Flores. Recordemos que con el paso del tiempo y hace pocas semanas, Gustavo González reconoció que el fotógrafo que había en la puerta del cuartel el día que llaman a Rocío Carrasco era de su agencia porque Antonio David filtra el altercado esperando que se fotografíe a la madre esposada.

El documental ‘Rocío. Contar la verdad para seguir viva' sigue dando de que hablar y en cada emisión se convierte en trending topic y en el tema más comentado en la mayoría de programaas de Telecinco a lo largo de la semana y un destacado en las revistas del corazón. Vida la Vida está viviendo momentos tensos estos días con las declaraciones de Rocío Carrasco. Hay colaboradores a favor de la hija de Rocío Jurado y otros en contra. Y eso provoca encontronazos como el que protagonizaron hoy Terelu y Diego Arrabal. La hija de la Campos le llegó a decir al fotoperiodista que "lo que a ti te joroba es que los demás tengamos trabajo".

Arrabal llegó a acusar a la hija de María Terersa Campos de que se había pronunciado "poco" sobre el documental en general y Rocío Carrasco en particular. "Eso te lo has sacado tú de la manga", le dijo Terelu a Arrabal. "Por los espectadores que hay no deberías ser tan déspota. Deberías dar tu opinión, que tampoco pasa nada si te preguntan por Rocío Flores y tú digas si te parece bien o mal", le replicó a la Campos.

Viva la Vida ha conseguido hacerse con un gran hueco en la programación de Telecinco. Lo que nació siendo un espacio llamado “Que tiempo tan feliz” en el que María Teresa Campos recordaba cada semana la vida y milagros de alguien famoso ha acabado convirtiéndose en esta última y nueva etapa en un programa más del corazón de la principal cadena de Mediaset España. Pero el camino ha sido largo hasta aquí.

Lo que parece que tenían claro en Mediaset una vez que se cumplió el contrato de María Teresa Campos para los fines de semana es que querían ampliar el público a gente más joven y, a la vez, conseguir un programa que completara a Sálvame o a Socialité y que pudiera generar polémicas, hablar de los reality de la casa y además hacer famosa a gente para que participara en este tipo de programas y luego sus compañeros tuvieran algo de que hablar.