Continúa la tensa relación entre Luis Cepeda y los tuiteros. El cantante se hacía eco en su perfil de esta red social de la propuesta del Gobierno para los autónomos a partir de 2023, que incluiría cuotas desde 90 a 1.220 euros mensuales en función de la previsión de ingresos.

De esta forma, el concursante de Operación Triunfo 2017 ironizaba sobre la fuga de capitales a Andorra, ya que el principado ha recibido a numerosos youtubers en los últimos años por sus ventajas fiscales. Sin embargo, el ourensano optaba por el país luso como posible nueva residencia ya que "Portugal es precioso".

La reforma planteada por José Luis Escrivá sigue el modelo progresivo de IRPF de los trabajadores asalariados. Bajo este nuevo paraguas fiscal, hasta el 54% de los autónomos gallegos pagarán una cuota de autónomos mínima que oscilará entre los 200 y los 245 euros el primer año. S

Varios seguidores recriminaron entonces al ourensano sus cada vez más habituales quejas al sistema tributario español. Estos comentarios generaban bastante controversia y normalmente optaba por borrarlos, aunque en esta ocasión no se echó atrás.

Cepeda se reafirmó en sus palabras ya que "pago impuestos como todo el mundo y no pido ayudas como todo el mundo", pero hacía saltar todas las alarmas con un curioso tipo impositivo superior al 60%: "Facturar 48.000 euros y pagar más de 30 al gobierno me parece un robo". Además, apelaba al "sentido común" con un lacónico "seas de derechas o de izquierdas".

Rápidamente, varios tuiteros ironizaron sobre sus capacidades gestoras económicas, asegurando que ese dato tenía que ser falso. Cepeda se defendió alegando que "yo no puedo decir nada pero si se me insulta por dar mi opinión, me tengo que quedar callado", ya que no es la primera vez que las redes sociales cargan contra él.

Preguntado por la curiosa cifra a la que hacía referencia, el cantante mostró una tabla con las nuevas propuestas de tramos y cuotas para autónomos para apoyar su opinión. Sin embargo, no se dio cuenta de que se trataba de ingresos al mes y no anuales, como él aseguraba.

Rápidamente fue reprendido por no saber leer la tabla antes de opinar sobre la misma. Además, varios tuiteros apuntaban que tributar unos 1.200 euros mensuales por unos ingresos de 48.000 euros les parecía coherente.