Julia Janeiro, la hija de Jesús Janeiro y María José Campanario, se ha convertido en influencer de un día para otro. Fue cumplir los 18 años y ser el foco de atención. Los medios de comunicación comenzaron a publicar las primeras imágenes de la hija de una de las parejas más conocidas del mundo del corazón y el Instagram de Julia echaba humo. Tenía unos 6.000 usuarios y las fotos típicas de una joven que trabaja las redes sociales. En cuestión de días, ya suma 175.000 seguidores y sus fotos tienen miles de "me gusta". Eso sí, la joven tiene cerrados los comentarios por lo que nadie puede escribirle a través de su Instagram.

Con la cantidad de seguidores de la hija de Jesulín y el interés que suscita su figura, su futuro con las marcas está asegurado. Podrían pagarle entre 300 y 500 euros por una fotografía en sus redes sociales. Las firmas de moda, belleza y estilo de vida son las más interesadas en el perfil de la que ya han apuntado que podría ser la Kardashian española.

Pero no todo es de color de rosa. Ni mucho menos. Hace unos días Belén Estaban reaccionaba en Sálvame a la noticia que daban los compañeros de Telecinco de Viva la Vida en la que se aseguraba que la hija de Jesulín vive en un piso de su padre. "Lo lógico sería que si tiene dos hijas y le da un piso a una se lo de a la otra también. Si no lo digo reviento", reconoció la colaboradora y ex pareja de Jesulín.

Habla una ex del novio de Julia Janeiro

Claudia, amiga de Julio Janeiro, ha asegurado que Julia no ve nunca 'Sálvame Diario' y tampoco habla de Belén Esteban. No se habla con ella porque está saliendo con el que fue el amor de su vida, ya que ésta estuvo saliendo en el pasado con Brayan Mejía, actual novio de la hija de María José Campanario.

La joven también ha confesado cómo se conocieron: "Nos conocimos en Oropesa, nos llevábamos muy bien, ella venía a Madrid y desde los 13 años yo estaba con Brayan". Y es que a Claudia no le ha hecho ninguna gracia ver las imágenes de su ex con Julia Janeiro y asegura que fue ella quien les presentó: "Ella cuando llegó a Madrid no podía estar en casa y le dije que se fuera a vivir a casa de Brayan".

Claudia ha explicado que en el colegio los niños se portaban muy mal con ella porque se metían mucho con su físico, además, ha explicado que el sueño de la hija del torero es ser maquilladora, pero siempre detrás de las cámaras porque a su amiga la confesaba que no quería ser famosa.