Parece que fue ayer. Y casi. Un 23 de abril se abría por primera vez la casa de Gran Hermano para acoger a los primeros concursantes anónimos que hacían historia en la televisión. Por aquel entonces en la televisión convencional no había programas tipo reality show. No existían formatos en los que simplemente se contemplara la vida de unas personas encerradas en la caja tonta. Pero aquel 23 de abril todo cambió. Y hace ahora 21 años.

"Esto sí que fue real", relataban los seguidores del formato en redes sociales aprovechando el aniversario. Muchos aseguran que era el único programa, al menos en su primera edición, que conservaba parte de la magia. De hecho una vez que terminó muchos aseguraron que la segunda edición ya nunca fue lo mismo. ¿La razón? Todos sabían ya lo que implicaba la fama y estar rodeado de cámaras de televisión.

El tenso momento vivido en Bajaras por una exganadora de Gran Hermano Vip

El tenso momento vivido en Bajaras por una exganadora de Gran Hermano Vip Chance

Gran Hermano volverá finalmente en 2021 a Telecinco. El discurrir de este programa a lo largo de los años no ha sido nada fácil. Más bien al contrario. Gran Hermano ha sido el reality más importante de la historia de televisión. Meter en una casa a un número determinados de anónimos, sin conocerse y dejar que la convivencia fluya como le venga en gana en una casa donde hay más cámaras que paredes... es un fenómeno que, además de ser un espectáculo para el espectador, es un análisis social que nos encanta consumir. Tras el escándalo que hubo en la edición de GH Revolution, en 2017, donde hubo un presunto abuso sexual, todavía pendiente de resolución judicial, no hemos vuelto a ver una edición en la que los anónimos, eran los protagonistas.

El reality más visto de todos los tiempos viene con más fuerza que nunca anunciando un protocolo de actuación ante posibles delitos sexuales. Y es que la productora Zeppelin ha desarrollado 44 medidas a llevar a cabo por si ocurriese algo similar a lo que ocurrió en GH Revolution

Entre todas estas medidas impuestas por la productora del programa, están la de una formación específica del personal del reality, actuar lo más rápido posible ante una situación así, comunicar a la víctima lo sucedido en un ámbito privado y además, garantizar la confidencialidad y el derecho a la intimidad de la víctima.