Continuamente en el ojo del huracán mediático, Kiko Rivera se ha convertido en noticia en las últimas horas por una presunta deslealtad a Irene Rosales en Chipiona el pasado fin de semana en su vuelta a los escenarios. Una reaparición marcada por los rumores y no solo de crisis en la pareja, ya que según el programa 'Sálvame' el Dj habría realizado varias paradas en el trayecto desde su casa hasta la localidad gaditana, gastándose 350 euros y encontrándose con una persona que no haría ninguna gracia a su mujer de enterarse.

Cansada de los rumores, Irene ha roto su silencio y tajante ha desmentido tanto problemas en su matrimonio como que su marido haya sufrido una recaída en sus adicciones, dejando claro que Kiko está recuperado totalmente y que entre ellos no hay ninguna crisis a pesar de que no se hayan dejado ver juntos en los últimos tiempos.

"Estoy bien, no sé de donde se han inventado todas esas cosas de verdad, pero que estamos bien", ha confesado Irene, afirmando que no se cree que su marido le haya sido nuevamente infiel: "No le voy a dar importancia porque no me importa absolutamente nada".

Molesta por los rumores de que Kiko haya sufrido una recaída y señalando que es "lo único que me puede llegar a molestar", la sevillana ha salido en defensa de su marido y ha 'denunciado' que es "siempre con el mismo tema. Es a la única persona que le dan cada dos por tres un machaque psicológico de que si vuelve a caer en sus adicciones, que si no* ya está, porque es de la única persona que se habla". "Yo creo que Kiko en su momento habló del problema que tiene y no creo que haya que estar refrescándoselo y acusándolo cada dos por tres", ha apuntado dolida, confesando que "es lo único que a mí personalmente me duele".

Cansada de los rumores de crisis en la pareja por su ausencia en el regreso de Kiko a los escenarios, Irene ha explicado por qué no arropó a su marido en su concierto en Chipiona: "Mi situación ha cambiado mucho. Yo antes podía acompañarlo más, ahora no puedo porque no tengo con quien dejar a las niñas. Antes también tenía la ayuda de mi madre, de mis hermanas* una hermana mía acaba de tener un bebé y es más complicado e imposible".

"Me hubiese gustado pero también sabía que iba a haber mucha gente, me podía haber llevado a las niñas pero al saber que habría mucha gente decidí quedarme en casa y sobre todo preparar cosas para el cole que ya había empezado", ha asegurado, dejando claro que no hay atisbos de crisis en su matrimonio: "Para nada. Que estamos muy bien".

Aclarando que el cuidado de sus hijas fue lo que le impidió asistir a la despedida de soltera de Anabel Pantoja en Doñana - "me dio muchísima pena, ¿a quién no le gustaría estar en una despedida pasándolo bien? Pero es que estamos en las mismas", ha asegurado - confirmando que no se perderán la boda de la colaboradora por nada del mundo.