Irene Rosales ha querido poner tierra por medio para disfrutar de unos días de desconexión. Hasta La Coruña se ha desplazado este fin de semana la mujer de Kiko Rivera con el firme propósito de olvidarse de las afrentas familiares que mantiene su marido a diestro y siniestro.

Isa Pantoja y Anabel Pantoja son en este momento los objetivos de la ira del Dj., ahora que se ha reconciliado con su madre, Isabel Pantoja, tras el fallecimiento de su abuela, Doña Ana Martín. Mientras Anabel disfruta de sus primeros días de casada, ha sido Isa la que ha tomado cartas en el asunto para responder públicamente a su hermano. "Lo que ha hecho mi hermano no es de una persona que esté bien. Yo entiendo que él esté decepcionado, pero ya tenemos una edad y no puede estar echando la culpa siempre a los demás. Que asuma lo que hace", dijo anoche Isa entre otras perlas.

Ante estas demoledoras declaraciones, Irene ha sido tajante, rotunda y contundente. "No he visto nada. vengo de estar un fin de semana desconectada con amigas y no he visto nada y tampoco tengo interés en lo que ha dicho isa", aseguró Irene al aterrizar en Sevilla tras disfrutar de un fin de semana con amigas lseparada de su marido y de toda la polémica, en el que se lo ha pasado "muy bien" y cerrando, de esta manera, filas con su cuñada.

Mientras ella disfrutaba de esos días alejada de todo el lío mediático de la familia de Kiko, su marido podría "haber recaído en sus adicciones", como desveló María Patiño en Sábado Deluxe.  “A mí me consta, sé, que necesita ayuda, sé que el domingo pasado pidió ayuda y no sé hasta qué punto lo va a tomar en serio o no”.  “Estoy preocupada no por lo que cuente, sino por su salud, cómo está y cómo le puede afectar. No le va a afectar de la misma forma a si está bien o a como está ahora. No podemos decirle lo que tiene que hacer, si no va a donde tiene que ir, es porque él no quiere”, apuntaba Isa Pantoja durante la entrevista.