Después de escenificar públicamente ante las cámaras su reconciliación con Marta Riesco, Antonio David Flores dejó a su amada en Madrid para celebrar, rodeado de su familia y sin la presencia de la reportera, su 47 cumpleaños. Una fecha muy especial que el excolaborador vivió con Olga Moreno, con sus hijos Rocío, David y Lola, y con su madre, Luisa.

Consciente del estupor de propios y extraños ante este inesperado posado con su exmujer horas después de dejarse ver de lo más romántico con la periodista, el ex de Rocío Carrasco dejaba claro que, a pesar de su separación, "seguimos siendo una familia". "No hay ningún problema con nadie, tengo a mi familia y la voy a tener siempre, independientemente de que haya rehecho mi vida. Está todo hablado y entendido por todas las partes" aseguraba, dejando entrever que Olga ha dado su 'aprobación' a su relación con Marta Riesco.

Algo sobre lo que la sevillana ha preferido no pronunciarse, manteniendo el silencio y la discreción que la han caracterizado desde que saltó a los medios el affaire de Antonio David y la cantante de 'No tengas miedo'. Sin embargo, y demostrando una vez más que su familia es lo más importante para ella, no se ha perdido el cumpleaños.

Acompañada por Rocío Flores, Manuel Bedmar y la pequeña Lola, y unos pasos por delante de Antonio David, de David Flores y de su exsuegra Luisa, Olga evitó hacer declaraciones sobre su exmarido, pero sí nos dejó ver su lado más espontáneo al besar y agradecer efusivamente a una seguidora su apoyo.

"¡Olé tú! ¡Creo que eres una sevillana-malagueña de pro* Y ganaste "Supervivientes" con todo el mérito del mundo*! Eres guapísima" le decía una señora al salir del restaurante donde Antonio David sopló en familia las 47 velas de su tarta. Un apoyo que emocionó especialmente a Olga que, radiante, exclamaba "¡Gracias! ¡Te voy a dar hasta un beso!" antes de acercarse a su fan y agradecerle con cariño sus palabras de ánimo.