Los enfados en Supervivientes van a peor. La noche estaba siendo un tanto complicada. Una sucesión de enfrentamientos agitaba más que nunca la palapa. Entre ellos, el protagonizado por Marta Peñate y Tania Medina, un duelo que ha estado marcado por las dudas que Marta ha sembrado sobre la novia de Alejandro: "Valgo más por lo que callo que por lo que hablo", decía.

Tania explotaba "cansada" de que siempre pusiera en duda sus sentimientos: "Parece que quieres estar tú con él, o con nosotros, si quieres te invito a la relación, porque te entrometes mucho". Y, acto seguido, le anima a contar aquello que decía que sabía. Marta ha preferido no seguir dándole vueltas: "Por supuesto que sé cosas porque tengo información, y no las voy a decir, que lo digan fuera. Vamos a dejarlo ahí, no sé nada". Después de su tenso encontronazo, comenzaban las nominaciones en la palapa. A Marta le llegaba su turno y, nada más escuchar la voz de Jorge Javier, la canaria rompía a llorar: "Estoy mal. Tengo mis santos y mis demonios. Sé que a veces hablo más de la cuenta. Muchas veces parece que digo cosas y que quiero hacer daño, pero no lo quiero hacer", comenzaba. "¿Tú en realidad sabías algo de ella?", le preguntaba el presentador. "Sí, ya se lo he contado", decía. "Se lo acabo de contar. A mí ella no me gusta". Jorge Javier le pedía que compartiera con todos su información: "Lo cuento porque se puso chula diciéndome que lo contara. Tres semanas antes de entrar aquí ella estuvo flirteando en una discoteca con un actor de otra cadena". Jorge ha tratado de averiguar de qué actor se trataba, pero lo máximo que ha podido conseguir es saber quiénes se encontraban con Tania en aquella discoteca: "Amor Romeira, Beatriz Retamal y Marina Ruiz. Si alguna quiere decir algo... Yo me enteré por otro lado y cuando le pregunté a una de ellas me lo corroboró".

Tras muchas conversaciones y muchos intentos por entenderse mutuamente, parece que las diferencias entre ambos al fin se han disipado. En uno de sus encuentros en la valla, Tania le decía algo que cambiaba el rumbo de todo: "Te echo de menos". Ambos se miraban y terminaban besándose antes de darse las buenas noches. 

Pero de la alegría se ha paso rápido a los lloros y los enfados. La última gala de 'Supervivientes' estuvo marcada por la reestructuración de los equipos y el cambio de playas. Eso sí, nada estuvo en manos de los concursantes. Fue el azar quien quiso que Anabel Pantoja continuara su camino separada de Yulen y que Alejandro siguiera sin coincidir con Tania. 

En directo vimos cómo ambos maldecían su suerte. La cara de Anabel hablaba por sí sola, no hacían falta palabras pero, además, la superviviente no pudo contener las lágrimas incluso antes de saber cuál iba a ser su destino. Por su parte, Alejandro expresó su frustración sin tapujos: "¡Qué mier**! ¡Qué p*** mala suerte tengo en esta vida!". Ahora hemos podido ver imágenes inéditas. Lejos de calmarse, Anabel no pudo dejar de llorar incluso cuando no se estaba conectando en directo. Yulen acudió a consolarla, pero ni su abrazo ni sus palabras consiguieron cambiar el sentir de la concursante.

Y, con ella, Alejandro. Su rabia se transformó en pena. Tania le abrazaba, pero la gala continuaba y un juego les estaba esperando. El andaluz se tapaba la cara con la camiseta y otros compañeros como Anuar se acercaban para darle ánimos. Ignacio lo hacía con Tania, que también terminaba llorando: "Yo te lo animo, tú tranquila que va a estar bien cuidado. No llores", le decía mientras le daba un tierno beso en la mejilla. 

Pero no ha sido el único que lo ha pasado mal. al y como ha podido saber 'Socialité', Anabel Pantoja habría activado el protocolo de abandono superada por la situación tras verse separada de Yulen. En la última gala de 'Supervivientes' se rehicieron los grupos y Anabel vio cómo el azar la separaba del esgrimista. 

Tal y como hemos podido saber, Anabel no soportaría estar alejada de Yulen, algo que le habría llevado a tomar al decisión de reunirse con el equipo del programa para hablar de un posible abandono. Estar en Cayo Paloma, el lugar donde el año pasado protagonizó un reencuentro con su Omar Sánchez, tampoco habría ayudado al estado anímico de Anabel.