Ignacio de Borbón, joven modelo que triunfa en Asia y primo lejano de Felipe VI, cruzó anoche el puente de las emociones de Supervivientes para abrirse en canal con la audiencia de Mediaset. No es el primero que lo hace, ya que otros concursantes como Kiko Matamoros o Nacho Palau han pasado peldaño a peldaño el doloroso cruce.

Palau, ex de Miguel Bosé, habló de muchos temas, pero en especial, de su familia y de su ex pareja. “Mucho dolor, mucha rabia, muchísimo rencor… Sufrimiento nuestro, de nuestros seres queridos, impotencia tremenda… Yo a Miguel lo quiero mucho. Es el padre de mis hijos y lo será siempre. Le daría la mitad de mi corazón si se lo pudiera dar. Espero que algún día ese rencor se disipe”, confesó Palau. Se acordó de sus hijos: “Lo más deseado para Miguel y para mí porque pasamos muchos años preparándonos y queriendo ser padres. Y todo se fue solucionando para que pudiéramos ser padres los dos. A día de hoy es lo mejor. Fueron niños muy deseados, muy felices y quiero que se sepa”, explicaba un muy emocionado Palau.

Media hora después, el familiar del Rey tuvo que abrirse en canal en "El puente de las emociones". El Borbón ha roto en lágrimas cuando cruzo el peldaño denominado "infancia": "He tenido una familia que me ha querido y me ha dado todo lo que ha podido siempre. Al mismo tiempo ha sido dura porque sufrí bullying durante años y he tenido muchos momentos de soledad. Eso me ha creado muchos complejos a lo largo de mi vida. Creo que ahora no los tengo y lo he superado. Pueden quedar cositas como que me cuesta mucho aceptar las críticas de los demás. A pesar de eso he tenido una infancia feliz", aseguró.

Sin embargo, Ignacio reconoció "haber madurado mucho en los dos últimos años": "En mi infancia si que sufrí soledad en muchos momentos. Siempre que llegaba a un colegio nuevo, la gente te mira, la gente comenta…por mi apellido. Lo he llevado bien normalmente en mi vida. No creo que sea la razón de todo tampoco", zanjó.