La donación es una transmisión gratuita de bienes, generalmente entre familiares. ¿Algún familiar te ha regalado una importante suma de dinero? ¿Te están ayudando a comprar un coche o un piso? Legalmente eso son donaciones, y hay que tributar por ese dinero en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, cuentan desde la Organización de consumidores y Uusarios.

Cuando se donan bienes que no son inmuebles, como dinero, fondos de inversión, acciones, etc., quien recibe esa donación tiene que declarar el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, aplicando la normativa de la comunidad autónoma donde haya residido mayor número de días de los cinco años anteriores a la donación.

Conviene presentar el impuesto, sobre todo si te han donado una cantidad importante de dinero. No hacerlo supone un riesgo innecesario.

  • De entrada, porque si Hacienda descubre que tienes de repente un dinero cuyo origen no puedes acreditar, podría considerar que existe una “ganancia de patrimonio no justificada” y exigir tributar en IRPF al tipo marginal (que puede llegar al 56% en algunas comunidades), más la sanción correspondiente.
  • Por otro lado, en muchas comunidades autónomas los importes a pagar por donaciones de ascendientes a descendientes son bajas, pues están bonificadas. Pero para poder aplicar las bonificaciones:
  • Se debe presentar la declaración del impuesto dentro del plazo legal, que es sólo de 30 días hábiles desde la donación.
  • Hay que formalizar las donaciones de dinero en documento público, asegurándose de que conste y esté debidamente justificado el origen de los fondos donados.

¿Cuánto dinero se puede donar sin tener que tributar?

Hacienda solo exige a las entidades bancarias informar de los movimientos bancarios superiores a 3.000 euros, pero esto no implica que por donar cantidades inferiores no haya que liquidar el impuesto de sucesiones y donaciones. No obstante, no suele perseguir entregas pequeñas de dinero en efectivo y regalos de pequeña cuantía. Hay que tener en cuenta los siguientes aspectos:

  • Quien recibe la donación debe pagar el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones en un plazo de 30 días.
  • Si se dona dinero en efectivo, no se genera ninguna ganancia en el IRPF del donante.
  • Si se donan acciones, fondos de inversión o inmuebles, quien dona debe tributar en el IRPF si la donación genera una ganancia.

Este impuesto depende de las comunidades autónomas, que son las que controlan los tipos impositivos o la aplicación de reducciones de la base imponible y bonificaciones de la cuota. Por lo tanto, su regulación varía de una a otra comunidad y los porcentajes cambian.