Adiós al atasco del fregadero con la cuchara de sal: el consejo del fontanero que cada vez copia más gente

Lo mejor es que no te hará falta ni desatascador ni productos químicos

Adiós al atasco del fregadero con la cuchara de sal: el consejo del fontanero que cada vez copia más gente

Adiós al atasco del fregadero con la cuchara de sal: el consejo del fontanero que cada vez copia más gente

Desde luego, las tareas domésticas no son un paseo, sobre todo porque hay muchos escollos. Además de que la casa requiere cuidados diarios, el más mínimo detalle puede convertirse en un gran problema al día siguiente. Por eso hay que prestar atención a todo lo que se tiene en casa y, sobre todo, a que todo funcione correctamente. Pero, claro, siempre surgen inconvenientes.

Uno de los más frecuentes es, sin duda, el problema del fregadero de la cocina cuyo desagüe no funciona al 100% y, por tanto, el agua no fluye correctamente. Un problema al que hay que poner remedio de inmediato. Son muchos los remedios que circulan por la red, pero entre muchos destaca el que vamos a ver a continuación. No sólo es muy útil, sino que además tiene una enorme ventaja, y es que no requiere el uso de productos químicos.

Un remedio que tiene la ventaja de ser barato, rápido y eficaz y que, además, hace un guiño a la sostenibilidad. En concreto, consiste en tener en casa dos ingredientes concretos. Quienes últimamente hayan querido dar un giro ecológico a su vida y a la limpieza, sabrán muy bien qué productos del hogar, aunque estén colocados en su lugar original, es decir, en el armario de la cocina, son muy eficaces para las tareas domésticas.

Hablamos claramente del bicarbonato de sodio y la sal gorda, dos protagonistas en el mundo de la limpieza del hogar por sus innumerables propiedades: blanquean, desinfectan, limpian, higienizan, tienen muchas funciones. Es necesario utilizar una taza de bicarbonato, una taza de sal gorda y una olla con agua hirviendo.

El procedimiento: rápido y ecológico

El procedimiento es realmente muy sencillo y rápido. Consiste en verter primero una taza de sal gorda por el desagüe, continuar con bicarbonato sódico y finalmente con agua hirviendo. Inmediatamente se producirá una reacción que desatascará las tuberías de desagüe. Una operación que será eficaz para obviar el problema del fregadero atascado y restablecer así su normal funcionalidad. A veces, atrapados por el nerviosismo que desencadena el inconveniente doméstico, la solución se nos puede escapar. Desgraciadamente, el atasco del fregadero es un problema que se presenta a menudo, por lo que atesorar el remedio eficaz, económico y ecológico y ponerlo en práctica cuando sea necesario es lo único que se puede hacer. A algunos les puede preocupar que la alta temperatura del agua pueda agrietar las tuberías; en realidad se trata de un inconveniente que, según los expertos en fontanería, no se produce. Así que puede estar tranquilo.

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