Soy farmacéutico y esto es lo que debes hacer si notas este tipo de tos

No todas las toses son iguales y conocer la diferencia puede ayudarte a elegir el tratamiento adecuado.

Dos tipos de tos, dos soluciones distintas

Existen dos tipos principales de tos:

Tos irritativa o nerviosa: Es esa tos seca, molesta, que parece que te raspa la garganta y no te deja dormir. Puede ser común en un resfriado o simplemente aparecer después de que el catarro ya ha pasado. La clave para calmarla es mantener una buena hidratación, recurrir a remedios tradicionales como las clásicas cucharadas de miel y, si persiste por la noche, hay jarabes específicos que ayudan a relajar la garganta y evitar los ataques nocturnos.

Tos productiva: Aunque pueda parecer incómoda, esta tos es buena. ¿Por qué? Porque es la forma en la que tu cuerpo elimina el moco atrapado en las vías respiratorias. Aquí no hay que frenarla, sino ayudar a que el proceso sea más eficiente. ¿Cómo? Con mucolíticos que hacen que el moco sea más líquido y fácil de expulsar, y con expectorantes, que estimulan su eliminación.

¿Por qué tengo esta tos y no hay manera de que se me quite? ¿Cuándo debo ir al médico?

El error más común: frenar la tos cuando no toca

Uno de los mayores errores es tomar jarabes para frenar la tos cuando en realidad lo que necesitamos es expulsar el moco. Por eso, antes de comprar cualquier medicamento, identifica qué tipo de tos tienes.

Así que la próxima vez que el farmacéutico te pregunte cómo toses, no te sorprendas. Tu respuesta puede ser la clave para sentirte mejor mucho más rápido.