Polémica en la boda de Marta López después de que un invitado reviente la exclusiva y filtre el vestido de novia: "Poco dejaba a la vista y a la imaginación"

Tras meses de espera, Marta López se ha dado el sí quiero por segunda vez. La madrileña que salto a la fama por su paso por Gran Hermano, se ha convertido en la mujer de Alejandro Huerta, un fisoterapeuta 12 años más joven que ella con el que la colaboradora se ha mostrado de lo más ilusionada.

Tanto, que no ha dudado en asegurar que, si su ya marido quiere ser padre, ella cumplirá su sueño bien adoptando o de forma biológica.

Hasta que llegue ese momento, la colaboradora ha celebrado su amor por todo lo alto con una ceemonia en la que se han dado cita numerosos rostros conocidos, muchos de ellos, compañeros de profesión de la ex de Alfonso Merlos.

Una fiesta en la que por desgracia, uno de los invitados podría haberse ido de la lengua al desvelar uno de los detalles más esperados de la boda: el vestido de novia, reventando así la suculenta exclusiva. 'Era blanco, a pesar de ser una boda civil aunque hubo un cura que bendijo la ceremonia. Era absolutamente clásico. Vais a sorprenderos muchísimo porque nunca habéis visto a una Marta tan clásica. Poco dejaba a la vista y a la imaginación'', ha revelado Aurelio Manazano en Socialité.

Su ya marido y su relación con el rey emérito

Sin embargo, además de conocer detalles de cómo está viviendo la madrileña estos días previos al enlace, se han conocido algunos datos sobre el futuro marido de la colaboradora. Alejandro Huerta es fisioterapeuta y tiene 39 años. Es dueño de una clínica en Chamberí, Madrid, y con formación avanzada en fisioterapia deportiva y geriatría. Desde hace varios meses mantiene una relación con Marta López, dieciséis años mayor que él. La pareja ha mantenido su historia con discreción hasta el anuncio de la boda. A los 25 años colaboró en la rehabilitación del rey Juan Carlos I tras sus operaciones en 2013, y en 2023 conoció a Marta.