Con los pies sobre huellas milenarias

El macho adulto de elefante africano puede llegar a pesar cerca de ocho toneladas. Se calcula que el dinosaurio saurópodo que estampó sus huellas en los acantilados de la playa de La Griega (Colunga) hace 150 millones de años pesaba unas 80 toneladas. Un enorme cartel ilustrado con la figura de este saurio y de sus compañeros los terópodos -que también dejaron su estampa en las rocas por los siglos de los siglos- da la bienvenida justo al lado del aparcamiento del arenal colungués, situado en el lugar conocido antiguamente como Pozu de los Cámbaros. Ese cartel indica el camino a seguir hacia el yacimiento de icnitas (término científico que define las huellas fosilizadas de animales). Aquí comienza la ruta.

El tramo hacia la zona de las huellas está perfectamente marcado y dista unos 600 metros de la desembocadura del río Libardón. Es un paseo fácil, con algunos tramos de ascenso, en el que los caminantes pueden ir disfrutando de la extensa línea costera de la playa y observar hacia el Oeste cómo, poco a poco, aparece Lastres; sus casas escalonadas en la colina, su puerto y su playa, escenario todo ello de la exitosa serie de televisión «Doctor Mateo». De hecho, si se visita la zona con tiempo, lo ideal es recorrer primero las estrechas y empinadas calles llastrinas siguiendo la ruta que identifica los principales escenarios de rodaje y bajar después hacia la playa para iniciar la senda costera.

Desde el yacimiento de La Griega, donde hay que desviarse obligatoriamente por encima del pedrero -siempre que el estado de la mar y la marea lo permitan- si se quieren ver las huellas, el camino se adentra en un bosque de eucaliptos plantados en perfectas hileras que en verano ofrecen una sombra más que refrescante para el caminante. La ruta se aleja en este punto de la costa para continuar subiendo hacia el interior, hacia un punto en el que en una bifurcación se puede tomar un ancho camino-pista asfaltado que conduce hasta la carretera que hay que seguir para llegar a Huerres si se quiere descansar un rato antes de continuar el trayecto. El sendero retoma en seguida la primera línea de acantilados para no abandonarla más y sobre los cantiles de Huerres se encuentra otro importante yacimiento de huellas.

A lo largo de todo este periplo, no se debe perder de vista a la derecha la imponente Sierra del Sueve, que abraza la costa durante todo el recorrido. Esta sierra es el mejor «hombre del tiempo» de la zona, ya que existe un refrán popular que dice que «cuando el Sueve pon la capa, pon la tuya y escapa», indicando que si la sierra se cubre de nubes, es fácil que llueva.

Desde la localidad de Huerres la senda mira al Norte para después virar al Este y continuar suavemente hacia La Isla. A medida que esta hermosa playa se acerca, se empiezan a ver las típicas casas de veraneo que, a pesar de ser muchas y de convertir la carretera de acceso en un hervidero continuo en la temporada estival, han respetado los cantiles y propician un lugar de paseo fácil para cualquier caminante. De hecho, son muchos los que tras horas de sol y baños buscan el verde de la hierba y suben a los acantilados a dar un paseo, empleando ese último tramo de senda, que concluye en este arenal. Aquí merece la pena detenerse en la iglesia de Santa María, construida en el siglo de XIX y perfectamente situada a pie de playa. Durante su construcción se encontraron vestigios romanos en la zona como mosaicos, columnas, hornos, monedas, muros y pavimento de una villa romana.

Siguiendo la línea de costa -bien por la arena, si la marea está baja, o por la carretera comarcal durante unos 2 kilómetros- se alcanza la playa de Barrigón, primero, y después La Espasa. En el último tramo de esta playa, denominado El Viso, arranca el «Camín Real», 3,5 kilómetros de paseo fácil, que bordea toda la costa del concejo de Caravia y permite disfrutar de su riqueza paisajística y de la escondida playa de La Beciella, a la que sólo se puede llegar a pie a través de estos senderos. En ese lugar desemboca el río de los Romeros, en cuya orilla se levantaron un enclave templario y un monasterio benedictino. Al final de la ruta esperan el arenal de Morís y las aguas del Cantábrico para pegarse un baño como recompensa tras la caminata.

Características

El trazado La Griega-Huerres-La Isla discurre por el sendero P.R. AS-134 «Ruta entre playas». Son 5 kilómetros para los que se emplean una hora y 45 minutos. Uso peatonal y ciclista. Dificultad: Baja. Desnivel: de subida, 59 metros; de bajada, 59 metros.

El camino entre La Isla y La Espasa puede hacerse por la arena: son 2 kilómetros para los que se emplean unos 20 minutos.

El tramo La Espasa-La Beciella-El Arenal de Morís discurra por el camín real a lo largo de 3,5 kilómetros, una hora de caminata.