Nadie diría que la riosellana Carmina González Pando cumplió el pasado sábado noventa años. De hecho, seguro que muchos se enteraron de su edad cuando el martes la vieron pasar en un flamante "Rolls Royce" por la calle Gran Vía, dentro de la enorme sorpresa que sus amigas de la tertulia "Garabato" le tenían preparada.

"Una gran señora como ella tenía que ir en un coche importante", explicó Estela Rosete, miembro de la tertulia y parte de la organización. González Pando había invitado a sus amigas de la tertulia a merendar, pero no se esperaba esta feliz "conjura" para celebrar que noventa años no se cumplen todos los días.

Las contertulias le sugirieron que la cifra bien se merecía acudir a misa antes de merendar y a ella le pareció adecuado. Su sorpresa fue mayúscula cuando, al salir del templo parroquial, vio que la esperaba un majestuoso coche al que se subió con la misma elegancia con la que lleva viviendo estos noventa años.

"No me lo esperaba y lo agradecí muchísimo a mis amigas", relató ayer la homenajeada, quien calificó la fiesta de "muy bonita" y aseguró sentirse "muy emocionada". El "Rolls Royce" condujo a Carmina Pando a quince kilómetros por hora a través de toda la Gran Vía y la llevó hasta el Gran Hotel del Sella, donde disfrutó junto a sus amigas de una cena coronada por el postre que Antonio Madrid, el "maître" del establecimiento, elaboró especialmente para ella.

La distinción del vehículo de lujo encajó a la perfección con el traje blanco de González Pando y el gran ramo de rosas que le entregaron las tertulianas, junto con una carta "en agradecimiento a noventa años de amistad". La homenajeada ha sido una mujer pionera desde su juventud, pues llevó la contabilidad del negocio de su padre, José Ramón González, empresario de la construcción y responsable de edificios tan emblemáticos como la rula de Ribadesella y la plaza de abastos.

González Pando ha sido siempre una persona muy activa y participa en la tertulia "Garabato" desde su fundación, hace siete años. Entre sus compañeras de mesa está la periodista radiofónica Menchu Álvarez del Valle, otro hito en la historia reciente del concejo. La riosellana acude, además, a clases de bailes de salón y también de "patchwork" y forma parte de la directiva de la asociación de amas de casa de Ribadesella "Virgen de Covadonga".

Es conocida por su distinguida elegancia, pero sobre todo por su "memoria prodigiosa", pues es capaz de relacionar hechos y personas durante décadas en la historia local. Carmina González Pando está soltera y durante muchos años no pudo desarrollar plenamente sus inquietudes intelectuales, pues estuvo cuidando de sus padres, que también tuvieron una gran longevidad y llegaron a centenarios.

La riosellana goza de una gran salud y prueba de ello es que hace menos de un año viajó en compañía de una prima a México, donde tiene familia. Aquel fue un viaje inolvidable, como también lo fue la tarde del martes y la celebración de su nonagésimo cumpleaños. Una jornada que varias de sus amigas compararon con la película "Paseando a Miss Daisy" y que protagonizó la dedicatoria que una de ellas, María Eugenia González Aguilar, le dejó en el perfil que la nonagenaria tiene en una conocida red social: "Que sigamos paseándonos juntas por la vida".