La poesía siempre estuvo presente en la vida de Alfredo González. Comenzó a jugar con versos antes de atreverse a coger una guitarra. "Empecé a escribir con unos 15 o 16 años, que es una edad en la que te enamoras mucho y quieres contárselo a todo el mundo", explica. Pero el momento idóneo para publicar un libro tardó muchos años en llegar. El cantautor, que presentó ayer su poemario "Hijas ilegítimas" en el pub Lord Byron de Avilés, cree que la ocasión perfecta para sacar a la luz poemarios es ahora. "La poesía tiene más relevancia actualmente que cuando yo empecé a escribir; no creo que ninguna editorial me hubiese publicado hace unos años, porque antes la poesía no se vendía", asegura.

Resulta evidente, viendo las listas de los más vendidos de todas las revistas literarias, que estos últimos años han supuesto una eclosión literaria de jóvenes poetas que, con un tipo de creación más sencilla y sincera, se han afianzado en los puestos de los libros con más tirada y popularidad. No obstante, el cantautor sigue prefiriendo la versión clásica de este género. "Cualquier tipo de literatura es buena, pero sigo esperando que en unos años pueda ver a Machado en las estanterías de los best-sellers, como se merece", dice. El turonense de 35 años no se considera el padre biológico de sus poemas. "Considero a las canciones mis verdaderas hijas legítimas, por eso opté por este título", asegura. Aunque prefiera mantenerse más cerca de la música que de la literatura, todo el proceso creativo del cantautor está relacionado y surge de una misma inspiración. "Algunas canciones se quedaron en poema y algunos versos acabaron siendo letras de mis discos". De hecho, el cantautor afirma que una de sus canciones más conocidas, "A borbotones", nació a partir de un poema que escribió hace años.

El cantautor Nacho Vegas tuvo la oportunidad de leer antes que nadie el primer poemario del artista. Vegas define las líneas de Alfredo González como unos llenos de "toxicidad y humedad". El turonense no podría estar más de acuerdo. "Tiendo a escribir historias que me hacen daño; entiendo muy bien que la gente defina mis letras y poemas como tóxicos". Durante su encuentro con LA NUEVA ESPAÑA, admite que su madre también le ve reflejado en este libro. "Mi madre me dijo que este libro es mi yo entero. No sé si eso es muy bueno o muy malo, pero me agrada transmitir sinceridad en lo que hago", relata. El contenido de "Hijas ilegítimas" se aleja de la temática habitual del cantautor, que afirma que este primer libro no incluye denuncia social. "No creo que haya un contenido social explícito en los poemas porque mis canciones son los suficiente sociales como para permitirme hacer un poemario más reflexivo. Aunque todo arte es revolucionario, a su manera", aclara.

González no está trabajando en un nuevo disco, de momento. "Ahora mismo estoy escribiendo más que componiendo, aunque hago alguna canción por encargo y colaboraciones", asegura. Le parece más fácil escribir para otros porque el grado de involucración es menor. "Me hago menos daño y me mojo menos si escribo para otros artistas", añade. Aunque sigue escribiendo, no cree que las librerías deban contar tampoco con un segundo poemario hasta dentro de un tiempo. "No sé si voy a seguir publicando; ojalá pueda y se me permita. Pero escribir este poemario me ha llevado muchísimo tiempo, por ahora no tengo prisa", remata.

"Hijas ilegítimas", publicado con la editorial Bandaàparte Editores, acabaría por llegar tarde o temprano. Al artista le gusta definir este libro como "una cuenta pendiente con la poesía", porque reconoce que sus poemas llevan años nutriendo las bases de sus canciones. Con tintes de Ángel González y Miguel Hernández, Alfredo González continuará promocionando su primer libro en los próximos meses por ciudades como Oviedo, León o Valladolid, aunque por el momento no se conocen más fechas. El libro está a la venta en todas las librerías del país desde el pasado lunes.