Felpudos absorbentes, paraguas contra el viento, toallas que mantienen el frío o manteles antimanchas son algunos de los artículos que se pueden adquirir en la Feria de Muestras de Gijón, que ayer celebraba su quinta jornada de apertura al público. Los stands comerciales son una parada obligatoria para los asiduos al recinto Luis Adaro, que muchos aprovechan para pasar el rato o encontrar alguna ganga.

Si algo tiene cabida en estos puntos de venta es la originalidad. Enseres como los que vende Valentina Abelleira, de "Confort de Hogar" son un buen ejemplo. "Este paraguas está diseñado para volver a su forma original aunque lo azote el viento o la lluvia", señaló la comercial, que con un solo 'click', plegó la sombrilla vuelta del revés. Eva Gómez , por su parte, ofrece un remedio para el calor o la fiebre, con unas toallas que mantienen la humedad de forma prolongada. "Basta con sacarlo del estuche, agitarlo de cinco a diez segundos, y el calor del paño se reduce a veinte grados por debajo de la temperatura ambiente", explicó la vendedora, de la empresa"Chill skinz".

Para mantener el buen estado de alimentos como patatas de bolsa o congelados, el mejor arreglo lo tiene Camila Bizy, que ofrece unos "sticks" para separar alimentos en bolsas que permiten conservar la comida cuatro veces más tiempo que las pinzas convencionales. "Además de prevenir que se estropee , podemos usarlos para separar en compartimentos la comida, y así evitar que se mezclen los olores", explicó la comercial. De buscar soluciones prácticas también puede presumir Celia Puerta, de la empresa francesa "Idear.vic", que vende felpudos de microfibra, una alternativa a las alfombrillas tradicionales, que absorben la suciedad y la humedad de los zapatos y previenen manchas en el parqué de las casas. "Es el felpudo que usan en hoteles y restaurantes; funciona tan bien que la gente hasta lo pone en la ducha", señaló la feriante, que vende este producto a diez euros la unidad.

Su compañero Francisco Alonso ofrece al público una cómoda herramienta para podar caños gruesos de madera. "Estas tijeras pesan mucho menos que los serruchos, no hay que afilarlas y no se oxidan", afirmó Alonso, que atendió ayer a un público numeroso.

En el mundo del hogar, que atrae a un buen número de consumidores voraces, tampoco podían faltar novedades. La empresa "Taptop" vende a sus clientes unas tapas que cierran cualquier tipo de recipiente y se adaptan a cualquier alimento. Salsas, fruta o verdura quedan perfectamente selladas con este material de cierre hermético. "Se puede usar para cerrar al vacío y para calentar en el microondas", señaló Silvia Pérez, que hizo una demostración con un melón y una jarra con agua.

Adrián Blanco, de "Confort Hogar" también tuvo que mostrar una y otra vez las particularidades de su producto, una fregona multiusos hecha con un material que no desprende pelusas, y cuyo cabezal ha sido diseñado de tal manera que el que la use mantiene la espalda recta en todo momento. "Sirve para cualquier superficie: parqué, tarima, tarima flotante, e incluso para ventanas de pvc", señaló el comercial, que vendía la fregona, con mopa y cubo incluido, por cuarenta euros.

La empresa "Idear.vc" también ofrece una idea revolucionaria: balletas que limpian a base de agua, hechas con fibra de bambú, y que no necesitan de ningún producto químico.Verónica Ortiz y Joanna Hilario apostaron por atajar problemas más inmediatos, como es la suciedad que se acumula en los manteles, y presentan al público un producto impenetrable a las manchas que funciona como un hule. "Al contrario que otros protectores de mesa, si lo metes en la lavadora no destiñe ni se va el color", explicó Ortiz.