El maliayo Raúl González ha encontrado en la medicina el mejor aliado para echar los "culetes" más saludables. El inventor acaba de llevarse el premio al producto más novedoso de cuantos se ofrecen en el Mercadín de la Sidra y la Manzana, de la XXV edición de la Fiesta de la Sidra Natural de Gijón, gracias a un ingenio que a pocos deja indiferente: el "Guxidrín", un escanciador manual elaborado con un tensiómetro. Una invención que cabe en el bolso de la camisa y que es tan sencillo como un corcho de caucho agujereado para controlar la cantidad de sidra, un tubo y una bomba extraídos de un tensiómetro y un pequeño apoyo metálico para sujetar el vaso.

"Se introduce el tubo en la botella, se da al tensiómetro y con un par de golpes de mano ya tenemos el culete escanciado", resume el inventor. Ni mancha, ni salpica, ni bate demasiado la sidra, ni ocupa espacio, ni hay que estar pendiente de baterías. Todo son ventajas, sostiene González, para un ingenio que se vende con un enfriador para botellas y que "está siendo un éxito en todos los mercados a los que lo vamos presentando, la gente pregunta mucho", asevera su socio José Ángel García.

Todo es artesanal, y en pos de perfeccionar el invento también disponen de un escanciador más evolucionado pero igual de ingenioso: con una bomba de bicicleta que genera presión y permite escanciar en un abrir y cerrar de ojos el "culín" preciso. Una versión "más pensada para restaurantes o para tener en casa" que se complementa con el "tope de gama", con soporte de madera fijo y de mayores dimensiones. "Ya nos han hecho varios encargos, y eso que estamos en fase de darnos a conocer", indica el creador, encantado con el premio que ayer le concedieron las autoridades municipales y que también ofrece, versión sencilla y a módico precio, tapones de silicona agujereados que sustituyen a los escanciadores clásicos.

Además del "Guxidrín" ayer también resultaron premiados en el mercadín los productos de "Viandas y saberes", con unas tartas veganas como principal novedad, explica Helena González en un puesto de lo más solicitado, y distinguido como "la mercancía mejor presentada". "Speltastur" se llevó el galardón al "puestu más prestosu", con un variado de empanadas y panes de escanda para perder el gusto. Y con sidra, mejor.