Se hicieron de rogar pero ya están aquí. Como todos los años. Medusas pero también Salpas, que son como las hermanas pequeñas. Las altas temperaturas de las aguas de la costa asturiana favorecieron la presencia de estos animales que en las dos versiones encontradas en las últimas horas en las playas de Asturias no representan peligro alguno para los bañistas.

Protección Civil del Servicio de Emergencias del Principado (SEPA) mantiene contacto con los servicios de salvamento de las playas asturianas. Las medusas y salpas aparecieron en los arenales llaniscos de Toró, Toranca y Borizu; en la playa de Vega, en Ribadesella; en la de Tranqueru y Candás, en Carreño; en Bañugues y Verdicio (Gozón), y en la playa de Aguilar, en Muros, entre otros. La variedad de medusa responde a las características de la Aequoria forskalea, habitual en el Atlántico y el Mediterráneo y que no produce picaduras. Las salpas, redondas, más pequeñas, transparentes y también sin sustancias tóxicas, aparecieron principalmente en playas del Oriente. La Aequoria forskalea es una medusa de umbrela aplanada y transparente, con canales radiales negros y bordes con filamentos finos.

En la playa de Rodiles (Villaviciosa) la presencia de salpas fue evidente. El coordinador de salvamento, Borja Madiedo, las describe muy gráficamente como "trozos como de gelatina transparente como con pintinas moradas" y añade que se observó "una mancha entre Tazones y Rodiles". La temperatura del mar estos días se sitúa entre los 22 y los 23 grados y eso es toda una llamada

Las medusas buscan la costa porque las aguas están cargadas de nutrientes, filoplancton y zooplancton. Tienen capacidad para moverse pero están condicionadas por las corrientes marinas, según explica Javier Cristobo, director del Centro Oceanográfico de Gijón.

De la labor de explicación a los bañistas no se libraron los socorristas de Caravia. "Las salpas son inofensivas pero la verdad es que tenemos una buena plaga". Dentro del agua las salpas forman unas cadenas "que impresionan, de varios metros", describieron los socorristas. La "plaga" también llegó hasta la riosellana playa de Vega, donde constataron la presencia de muchísimas salpas ya desde el lunes.

En Candás los más valientes se arrojaron al mar a presenciar los pequeños bancos de medusas que se fueron formando cerca de las rocas de la costa. Un espectáculo para añadir al espléndido día de verano. Tanto en Gozón como en Carreño, los servicios de socorrismo hicieron una batida por mar y tierra con el fin de hallar más ejemplares.

Lucía Fandos, bióloga del Museo Marítimo de Asturias, halló varias medusas en la playa de La Ribera de Luanco y recogió varios ejemplares para su posterior estudio.

En Carreño, los trabajadores municipales recogieron las medusas ayudados por los bañistas de la playa de La Palmera. Las depositaron en una bolsa. El baño se desarrolló sin problemas durante toda la jornada. Los primeros ejemplares fueron hallados hace varios días en la playa de Xivares, Carranques y El Tranqueru y de ahí, fueron desplazándose a Candás. Todo indica que en los próximos días las medusas irán apareciendo en otros arenales. Y, ojo, las hay de muchas "familias", y algunas no tan amables como las de estos últimos días. En Castrillón, según el responsable de socorrismo Ignacio Flórez, se hallaron salpas. "Ya aparecieron el domingo en la playa de Bahínas y alguna más en San Juan y Salinas", explicó. El oceanógrafo Mario Lebrato especificó que el lunes en el Cabo Peñas había una capa de gelatinosa por la superficie y muchas cosas raras". Aunque no son peligrosas, " mejor no tocarlas por abajo", advierten los expertos.