Cada vez son más los que comparten la opinión de que otra forma de comercio, más justa y responsable es posible. Y eso incluye comprar en los barrios. Actualmente en España circulan más de cuarenta monedas paralelas al euro, muchas de estas de carácter social. Siguiendo esta iniciativa, el año pasado los vecinos de Nuevo Gijón, Perchera y La Braña comenzaron a incentivar la compra habituales en comercios de la zona con los llamados santiaguines. Estas monedas, impresas en coloridos tickets con diseños de carácter asturiano, han conseguido ganarse la simpatía de muchos de los vecinos de estos barrios gijoneses.

Cada año, en unas fechas señaladas -como ahora, en la previa de sus fiestas patronales de Santiago- algunos locales cuelgan los carteles de colaboradores, para que sus clientes sepan que allí pueden realizar sus compras del día con los santiaguines. Antes sólo han tenido que pasar por la asociación vecinal para cambiar de moneda. La transacción es sencilla: un euro por un santiaguín. La clave está en que con los billetes del barrio se pueden tener descuentos y ventajas vecinales. Este año son 18 los establecimientos comerciales y negocios donde se acepta la moneda propia. Hay de todo: desde una herboristería, a cuatro tiendas de alimentación, seis bares o cafeterías, una academia de baile, una ferretería, una zapatería, una peluquería y hasta una tienda de objetos festivos. Todos aceptan moneda propia y además lo hacen con descuentos y ofertas: Un rioja y una tapa de ensaladilla por dos santiaguines; un corto de cerveza por un santiaguín; una docena de minihamburguesas, por cinco santiaguines... y suma y sigue.

A Macu Martín, responsable de la joyería "Marce" la propuesta de acuñar dinero propio del barrio le parece una manera de "hacer unión" aunque el suyo sea un negocio donde se prevé poca circulación de santiaguines. "La gente, para colaborar con la iniciativa, suele cambiar cifras de dinero bajas para lo que se compra en una joyería, pero sí hemos vendido alguna cosa, ya que hacemos un veinte por ciento de descuento en todas las compras que se paguen con santiaguines". En otros negocios,también se comparte esta opinión, como señala Olga García, de la cafetería "Momo", que dice haber participado los dos años en la experiencia de la moneda del barrio: "el año pasado se hizo la iniciativa en verano y en invierno. Nosotros tuvimos más éxito en invierno, cuando ya lo conocía más gente, aunque también dependerá del negocio. La propuesta me parece muy bien, es consumo y producción del barrio, aunque los clientes sean más o menos los mismos está bien que la gente se implique".

Esta iniciativa, al igual que otras actividades que se sucederán estos días en el barrio, como cine, teatro, o gymkanas para descubrir el comercio de la zona, están organizadas por la Asociación de Vecinos de Santiago, para la que tampoco faltan palabras de ánimo, ya que como se refería Lula Mariño, de la herboristería "La Herbosura" , "todo lo que sirva para fomentar el comercio, en un barrio que ahora en verano se queda más triste que la una, es estupendo. La asociación de vecinos tiene muchas actividades, organizan cursos, ponen puestos en el parque y que la verdad es que trabajan mucho"; también les llegan ánimos de parte de Ana María Lera, de "El Bodegón de Josón", que también hablaba de que "se nota algo más de gente y la iniciativa me parece muy bien, todo lo que sea a favor de barrio y los negocios es estupendo".