Una vez rematada la temporada, cumplido todo el trabajo, llega el momento de descansar. Pero en Navia, donde el deporte ha pasado a ser una constante en la vida de los vecinos, no se para. Son diversas las iniciativas que impulsan la práctica de ejercicio físico, combinado con el juego y el aspecto lúdico, dirigidas a la infancia. Una alternativa saludable para las mañanas de julio es el campus infantil que organiza el Club Atletismo Occidente, una iniciativa que cumple su tercer año superando todas sus marcas. Esta vez, y repartidos en dos quincenas, serán unos ochenta los niños y niñas los que se divertirán de lo lindo, disfrutando del deporte.

Andrés López, Francisco del Valle y Ana Rojo son los tres monitores que se encargan de planificar y llevar a la práctica las sesiones, que combinan aspectos técnicos, como la ejercicios de resistencia y velocidad, con juegos, como el pillapilla, carreras de orientación o juegos en la arena de la playa.

"Tenemos dos objetivos. Por un lado, que los niños que nunca hayan hecho atletismo conozcan las diferentes disciplinas, y se familiaricen con ellas. Siempre tratamos que se vea como un juego, para que disfruten de la experiencia", señala Andrés López. La otra meta va dirigida a los participantes que están en el propio club durante toda la temporada: "Para ellos, esto se plantea como un mes de premio, porque jugamos mucho más y se hacen actividades muy diferentes, no solo de atletismo", añade López.

El campus consta de tres sesiones semanales, que comienzan con un ejercicio de activación, "para que se despierten". Después, se divide el grupo según las edades, pasando a practicar algunas de las modalidades del atletismo. Al final llega la sorpresa: ayer, por ejemplo, los pequeños deportistas disfrutaron de una yincana en inglés. La variedad es esencial para que la diversión sea completa.

La organización del campus se muestra "muy satisfecha" con la acogida que cada verano, desde su nacimiento, tiene esta alternativa para las mañanas estivales. "Llenamos el cupo en apenas dos semanas. La gente ya lo conoce, y se apunta rápido. Tenemos también participantes llegados de fuera de Navia, que vienen con sus familias a pasar aquí el verano", apunta Andrés López.

El campus se desarrolla, principalmente, en las instalaciones del Pardo, en un entorno ideal para la práctica deportiva. A pocos metros está el circuito de Veiga de Arenas, y un poco más allá, la playa. La principal novedad este año será que cada quincena rematará con una jornada de actividad y una noche de acampada en el camping de Arbón, en el vecino concejo de Villayón. "Va a ser un final de campus muy divertido", presagia una de las participantes más activas, Baía Touza.