Cuentan en la Asociación cultural arenesca de festejos (ACAF), una conocida organización vecinal de San Juan de la Arena (Soto del Barco), que el año pasado tuvieron la feliz idea de organizar una parrillada para financiar sus fiestas. Acudieron a Mery Alonso, la hija de Juanito, el del Gurugú, uno de los locales más conocidos durante décadas de todo el concejo, cerrado desde el año 2000. La respuesta que obtuvieron los dejó sentados: "Perfecto, pero si me pongo, no aceptó hacer menos de 5.000 pinchos morunos". Dicen que fue así como nació el Festival de morunos y sardinas, que hoy celebra su segunda edición con una multitudinaria fartura, con 6.000 pinchos morunos y 450 kilos de sardinas para las cerca de 700 comensales que ya han solicitad "cita previa".

Mery Alonso, que a sus 68 años sigue al pie del cañón desde que empezara a trabajar con su padre a los 13, rebaja el contenido épico. "No puse condición alguna, ni número cerrado. Quisieron hacer un homenaje a mi padre y al Gurugú, así que colaboré. Quiero que haya fiestas en el pueblo y que la gente esté unida", clarifica.

Aunque dice Mery Alonso que no hay condición ninguna, en realidad sí que existe una norma fundamental. Todo tiene que responder al aroma que desprendía el mítico local de San Juan de la Arena, que abrió sus puertas en 1963. Esa idea se sigue a rajatabla y, por eso, la receta del mejunje con el que se pringan las sardinas, más secreta que la de un conocido refresco de cola, hasta las dimensiones de las tres parrillas en las que se cocinará la carne, son exactamente iguales que las del Gurugú de siempre.

"La receta me la legó mi padre. No la revelo a nadie. No la tengo escrita en ninguna parte. ¿Para qué? Después de hacer 6.000 pinchos morunos, me la sé bastante bien", comenta en tono animado Alonso. "Se la intentaron comprar varias multinacionales. El Gurugú alcanzó una fama increíble. Mucha gente conoce La Arena por el bar. Venía gente de todo el país solo al pincho moruno", relata Fernando López, presidente de la ACAF.

No solo turistas de muchos puntos de España, también personalidades se dejaron caer por la desembocadura del Nalón. Ramón Mendoza, quizás el dirigente del Real Madrid más conocido después de Santiago Bernabéu y Florentino Pérez, o Carlos Arias Navarro, presidente del Gobierno entre 1973 y 1976 probaron la famosa receta del Gurugú.

La historia del local es un cuento de éxito. Juanito, el del Gurugú, llegó en 1963 desde Santoña. Empezó con un pequeño edificio y triunfó. En el 2000, el bar cerró las puertas. El edificio es en realidad una concesión del Ayuntamiento de Soto del Barco, que ahora está en manos del Club Puerto Norte. "Quizás me quedé un poco atrás. En ese tiempo, trabajé con una amiga y me dediqué a mis otros negocios", subraya Mery Alonso.

El segundo Festival de morunos y sardinas aspira a batir los números del año pasado. "Fuimos un poco apurados y hubo gente que se quedó sin comer", admite la mujer. "Este año, tenemos en la reserva 500 morunos, por lo que pueda pasar", advierte López. A la vez que la comilona, el Ayuntamiento organiza la feria de artesanía, también al pie de la Rula. "Ojalá vendan mucho", desea el presidente de la ACAF desde un San Juan de la Arena al que ya se le hace la boca agua con la magia del Gurugú.