"¡Cómo echamos de menos el Gurugú! ¡Que vuelva el Gurugú!", decían entusiastas los más mayores hablando sobre el mítico restaurante de nombre tan peculiar de San Juan de la Arena. Los sentimientos estaban a flor de piel ayer en el campo de la rula de la parroquia arenesca. Los fieles al establecimiento recordaron viejos tiempos llenos de nostalgia en el II Festival de morunos y sardinas. Durante toda la jornada, cientos de nostálgicos se acercaron a San Juan de la Arena para comer uno de los más de 6.000 pinchos morunos y los muchos kilos de sardinas que se prepararon a la brasa. Los vecinos más veteranos recordaban cómo eran aquellas tardes que se alargaban hasta la nocturnidad en las parrillas del restaurante, cerrado hace ya 18 años. Por otro lado, los más pequeños disfrutaron durante toda la jornada de esos manjares de receta secreta de la familia del Gurugú.

Se preveía que la jornada fuera un día grande para la localidad arenesca y, visto lo visto, no defraudó a nadie. Se batió el récord del año pasado en más de mil guarniciones. Los pinchos morunos macerados y especiados recordaron a aquellos que llenaron el Gurugú de famosos. "El restaurante llegó a ser una institución en la zona. Por aquí pasó mucha gente famosa como Sara Montiel y demás. Recordar el Gurugú es muy emocionante, no solo por el establecimiento; también por toda la familia que ya no está", afirmaba en su "mini-descanso" María Fernández Alonso, nieta del Juanito, fundador del popular restaurante.

Entre música de "Los Panchos", Josefa Almiera, buscaba un plato libre para comer un pincho moruno que se había quedado frío. "Me da igual, están igual de buenos. Si no podemos hacer que vuelva el Gurugú, comeremos hasta reventar", dijo la praviana, emocionada al ver a tanta gente. La jornada festiva de ayer fue un buen momento para soñar con comilonas de décadas pasadas y la brisa del Nalón haciendo de panorámica. ¡Larga vida a los manjares del Gurugú!