El sonido de clarines y timbales cobra especial importancia para los aficionados a los toros ante la llegada de la feria de Begoña, único reducto taurino que sobrevive todavía, no sin esfuerzo, en Asturias. La plaza de El Bibio, que lleva albergando corridas de toros desde hace 130 años -y antes en otros emplazamientos de la ciudad-, tendrá sobre su ruedo durante seis días a las principales figuras del escalafón en una feria que se antoja clave para dilucidar el futuro de la tauromaquia en Gijón. Su continuidad dependerá, al margen de las elecciones municipales y sus pactos poselectorales, de la afluencia de público en los tendidos -la renovación del abono respondió en líneas generales como en años anteriores- de un coso que ya está perfectamente engalanado para abrir la puerta de toriles.

Seis días de toros en los que actuarán tres novilleros -Rafael González, Francisco de Manuel y Manuel Diosleguarde abren hoy la feria con una novillada de Zacarías Moreno aprobada ya por los veterinarios-, tres rejoneadores de primer nivel y doce matadores de toros -uno de ellos, Álvaro Lorenzo, debutante en El Bibio, que lidiarán un total de 36 reses bravas de ganaderías de renombre como Garcigrande y Montalvo o la novedad de "El Freixo" -propiedad de "El Juli"- y Charro de Llen. Todas de encaste Domecq a excepción de los toros de rejones, de procedencia Murube.

Las figuras del toreo, por méritos propios, son quienes acaparan el tirón de los aficionados que desde el primer día hicieron cola por lograr una localidad. Julián López "El Juli", máxima figura del toreo actual con respeto de Enrique Ponce, celebrará en El Bibio sus veinte años de alternativa, de ahí que su imagen ilustre el cartel anunciador de los festejos. Alternará en El Bibio con Alejandro Talavante, cuya faena la temporada pasada en esta plaza, al natural, permanece imborrable en la memoria. José María Manzanares completa el cartel estrella.

No menos importante es el regreso del imprevisible Morante de la Puebla, que estará acompañado por el adiós de Juan José Padilla y el huracán peruano Andrés Roca Rey, figura indiscutible de la tauromaquia actual y que el año pasado cayó de pie en su debut en Gijón al salir en hombros por la Puerta Grande, tal y como acaba de lograr en la pasada feria de San Fermín, por ejemplo. Roca Rey, al que desde novillero sin picadores ha acompañado y arropado el maestro José Antonio Campuzano, comenzó como revelación y ya se ha convertido en una realidad que cuenta hasta con detractores, factor imprescindible para ser figura del toreo.

La jornada dominical estará protagonizada por el festejo de rejones, en el que repiten Andy Cartagena y Diego Ventura -viene de cortar un rabo en Las Ventas y abrir su decimosexta Puerta Grande- junto a la novedad de la amazona francesa Lea Vicens, tutelada desde sus primer galopes por los hermanos Peralta. Jiménez Fortes, José Garrido y Álvaro Lorenzo suponen el ejemplo de juventud que busca abrirse camino en el toreo, con diferentes estilos, mientras que el día 15 serán Antonio Ferrera, Miguel Ángel Perera y Cayetano quienes clausuren la feria.

¡Que Dios reparta suerte!