Los toros de la ganadería salmantina de Montalvo regresan a El Bibio, donde ha lidiado toros importantes otras temporadas, con el aval de un triunfo rotundo en Las Ventas de Madrid en el mes de junio. Su ganadero, Juan Ignacio Pérez-Tabernero Montalvo disfrutó ayer de la primera de feria en Gijón.

- ¿Confiaba en un triunfo como el de Madrid?

-Triunfar en Madrid es tan complicado y difícil que cuando se tiene éxito se asimila muy bien, pero la repercusión ha sido mayor de lo que me esperaba.

- ¿Su ganadería está en buen momento?

-No sería correcto que me pronunciase sobre el buen momento de mi ganadería porque sería pretencioso. Eso es algo que deben decir los toreros y el público.

- ¿Al menos está satisfecho?

-Este año, de momento, solo he lidiado tres toros en Illescas y la corrida de Madrid. El grueso de la temporada viene a partir de ahora con Gijón, Guijuelo, Cuenca, Salamanca, Palencia, Zaragoza? Lo importante viene ahora

- ¿Cuántas corridas lidia al año?

-Entre ocho y diez corridas de toros y no tengo ningún interés en pasar de ahí. Este es un negocio en el que la rentabilidad es muy ajustada, con lo que estimo con este número para mí es suficiente.

- ¿Es rentable una ganadería?

-En mi caso tiene una rentabilidad mínima para el dinero que está invertido. Hay que andar con pies de plomo porque perder dinero no le gusta a nadie. Todas las ganaderías tienen un bache, yo lo he tenido, ahora no, pero tendré uno en el futuro y ahí la rentabilidad baja de forma ostensible. Yo si veo que durante dos años seguidos pierdo dinero le corto la cabeza. Lo tengo muy claro.

- ¿La afición todo lo cura?

-De la afición no se vive y no voy a ser yo una fábrica de hacer ruinas, ni podría pagar a las diez personas que trabajan en la finca. Si la cosa no va bien, pues corto y me dedico a otra cosa. Si una empresa, de lo que sea, pierde dinero, habría que ser tonto para seguir perdiéndolo.

¿Sin corridas de toros sería inviable tener una ganadería de bravo?

-Igual alguien lo tendría como un parque temático, pero en mi caso tengo clarísimo que no.

- ¿Desaparecería el toro bravo?

-Está claro, pero no solo desaparecería el toro, también la cultura y la tradición. Muchas cosas.

- ¿Hay maltrato animal?

-Lo del maltrato animal son pedagogías populares, pero cuando se ponen a explicarlo no saben qué decir. Tampoco se podría matar un ternero ni pescar un atún, porque con la caña se le haría sufrir. Si es que sufre, claro, porque yo no lo sé. Estamos en una época con mucho populismo, de ir contra lo español. La pena es que haya mucha gente que se crea el populismo. Desgraciadamente lo vemos no sólo en los toros.

- ¿Tiene confianza en la corrida de Gijón?

-Si no tuviera confianza? Luego ya no sabes lo que ocurrirá, pero siempre voy con interés y entusiasmo en ver el resultado de cada corrida.

- Las figuras quieren sus toros. ¿Crece la responsabilidad como ganadero?

-Esto es más difícil que un examen a notarías. Cada corrida es un examen. Si te sale una corrida mala ya se mosquean, pero si te sale la segunda ya no te la matan más. Ése es el problema.