No fue el último guateque, como rezaba la canción de "Laredo" que muchos de los asistentes al concierto de anoche en El Botánico bailaron de jovencitos, cuando aún no había que echar "Tres en Uno" en las bisagras (léase articulaciones) que chirrían; pero lo pareció, por las canciones que se cantaron y por quienes las interpretaron, que pese a estar metidos en años, no han perdido un ápice de marcha y de compromiso con un tipo de música que hizo furor en su tiempo y que sigue manteniendo adeptos, con el paso de los años.

Se trata de las canciones de los años sesenta y setenta, foráneas y autóctonas, que ayer sonaron sobre el escenario del jardín más primoroso de Gijón, en la voz de Micky, por el que parece que no pasan los siglos (ni el XX ni el XXI), y al ritmo de las guitarras y la batería de un grupo de veteranos músicos de esta ciudad, integrantes de "Plana Mayor": Gonzalo "El Pifu (batería y voz)", Tino Acebal (guitarra y voz), Rafa Laviada (guitarra y voz), Felipe del Campo (bajo y voz) y Pepe Natal, algunos de ellos míticos desde los tiempos de "Alcatraz". Hubo temas clásicos de Elvis y "The Beatles" y versiones de bandas señeras de otros tiempos hasta que apareció el "hombre de goma" y echó mano de su composiciones de su último disco y de lo más granado de su extenso repertorio. Y todos se quitaron treinta años de encima.