En Lugo de Llanera han hecho un gran esfuerzo para recuperar e impulsar sus fiestas de Santa María. Y ayer este gran trabajo se vio recompensado con las calles abarrotadas para presenciar el desfile de carrozas, siete vehículos (el año pasado fueron dos) hechos con gran originalidad e imaginación.

Una de ellas fue la del grupo de moteros "Los pistones", que con su carroza "Bay Watch" se lanzaron a "socorrer" a la comisión de festejos convertidos en especiales "vigilantas de la playa". "Pidieron colaboración a todo el mundo y nosotros vinimos a ayudar", apuntó Iván Fuertes (Purru). La música del desfile la aportaron las tres bandas: "Fonte Fuécara", la charanga "El Alboroto" y el grupo folclórico "Picu Santufirme", que se volvió a juntar para la ocasión después de varios años desaparecido.

Gracias a todo este apoyo, el desfile tuvo una gran acogida entre el público, que llenó las aceras de la Calle José Manuel Bobes, la carretera general de Lugo. Las carrozas no se limitaron a desfilar, también hicieron paradas para mostrar sus espectáculos. La asociación "All Rugby Llanera" demostró cómo entrenan sus jugadores sobre unas colchonetas en mitad de la calle, por lo que recibió muchos aplausos.

Entre gran expectación las carrozas llegaron finalmente al prado de la fiesta, donde posteriormente se pudo ver una Muestra de Folclore. Por la noche, el "Grupo Aroma" amenizaría la verbena. A los vecinos de Lugo de Llanera y alrededores ya solo les quedan dos días para disfrutar de sus fiestas. Hoy hay unos juegos y animación para los más pequeños, a partir de las seis de la tarde, y se celebra la cuarta gran verbena a cargo del "Grupo Ideas". Mañana será el reparto del bollo a partir de las seis de la tarde, que pondrá fin a los festejos con una nueva verbena.

Son dos días aún de celebraciones los que quedan en Lugo, donde están más que contentos con el resultado de lo que hasta ahora se ha organizado.

La comisión de fiestas se apoya en sus vecinos para sacar adelante Santa María, aunque no sólo colaboran los residentes, sino que al gran esfuerzo de los organizadores y de la gente de Lugo se les unen también los de fuera. Prueba de ello fue la gran afluencia a las carrozas.

"Estas fiestas eran unas de las más grandes de la zona, pero con los años fueron perdiendo mucho", asegura Ángel Fernández, presidente de la asociación vecinal. Pero ahora, junto a la renovada comisión de fiestas, tratan de volver a hacerlas grandes. Y van por buen camino.