La de La Isla, en Colunga, es una playa urbana de unos 800 metros de arena dorada y fina que debe su nombre, como el de la parroquia, al islote que reina en el margen izquierdo del arenal. Es este un histórico lugar de veraneo en el citado concejo del oriente asturiano, pudiendo descubrirse, en su entorno y por ejemplo, varias casonas del siglo XVIII, y chalés de los siglos XIX y XX.
En su paseo marítimo se pueden admirar también algunos eucaliptos centenarios y de considerable altura y dimensiones. Muy cerca de la playa está la iglesia parroquial de Santa María de Tona. Cuando la bajamar está plena se puede llegar, incluso, hasta el islote, al quedar unido el arenal por un tómbolo.
Para los amantes de los largos paseos matinales, y también en bajamar, hay otra caminata hasta la playa del Barrigón. En la zona también se destaca un tramo de acantilados entre 50 y 75 metros de altura de gran interés natural y cultural pues, al parecer, se encontraron en la zona restos castreños y romanos, lo que da idea de su importancia.
Una de esas personas que gustan de madrugar y disfrutar de momentos de placidez y belleza dando un largo paseo por esta playa es Isabel Ortega, del País Vasco, que suma unos cuantos años disfrutando de unos días en este arenal colungués.
"Durante la semana no hay mucha gente, pero eso sí, en fin de semana se llena", afirma esta mujer quien bromea: "Aquí no se levantan las persiana hasta las doce. Lo digo porque es más o menos a esa hora cuando veo llegar a la gente a aquí". Ella, bien temprano, suele recorrer esta playa en uno de sus mejores momentos, pues a primera hora es cuando La Isla se descubre en toda su belleza.
Entre los diferentes servicios con los que cuenta la zona están los aseos, lavapiés, duchas, papeleras, una zona con parque infantil, equipo de salvamento en temporada estival, acceso para minusválidos, chiringuitos y bares donde comer tanto al pie de playa como en su entorno.
Ricardo Fernández Palomeque es el director de la Escuela de Surf Marejada que, en La Isla, además de clases surf, paddle surf, yoga y paddle yoga, también oferta campamentos para jóvenes con inmersión lingüística en inglés, cuenta con albergue-hostel, chiringuito y restaurante. "Con la escuela deportiva llevamos desde 2003. Hace cuatro años, aquí en La Isla, decidimos englobarlo todos estos servicios juntos", afirma este profesional que lleva 26 años surfeando, 17 dando clases de surf y 15 compitiendo a todos los niveles. Fue 5 veces campeón de España de surf en la modalidad de longboard y varias veces campeón de Asturias.
"Esta playa es muy familiar. Tiene dos tipos de usuarios. Por un lado, los que viven aquí y tienen su segunda residencia; y luego está el usuario ocasional de fin de semana, que es cuando el arenal registra un mayor número de usuarios. En cuanto al turismo nacional, mayormente son de Madrid así como también del País Vasco y gente también de León, Zamora o Valladolid. También está volviendo el turismo internacional que se detuvo con la pandemia, sobre todo franceses y belgas", explica Fernández.
Camino de las viejas trincheras, donde existen unas vistas impresionante de la playa y los acantilados, van los madrileños Alejandro Gutiérrez Rodríguez y Ana Domínguez Aparicio, quienes han venido en otras ocasiones a Asturias, al a zona oriental, pero esta es su primera vez en Colunga. "Nos gusta mucho esta tierra, ya hemos repetido en Llanes y para más adelante tenemos pendiente hacer alguna ruta por Somiedo", explican ambos. Son biólogos y grandes enamorados de los entornos naturales. "Yo fui una vez a Somiedo con la universidad durante un curso que duró cuatro o cinco días y fue una experiencia maravillosa. Ana no lo conoce y por eso es nuestro próximo destino aquí", añade Alejandro.
En cuanto a la playa de La Isla y su entorno no podrían sentirse más satisfechos. "Aquí es la primera vez que estamos y es chulísimo, muy bonito. La playa tiene su encanto y también todo el paseo por el acantilado", resumen.
Habrá que tomar nota.
¿Cómo llegar?
Desde la A-8 tomar la salida 346 (Colunga-Lastres) y, en la rotonda, coger la cuarta salida para acceder a la N-632 hacia Ribadesella, vía que a traviesa el pueblo de La Isla. En un tramo, a la izquierda, está indicada la entrada a la playa.
No perderse
Las trincheras que se excavaron a varios metros de la playa, durante la Guerra Civil, y que no llegaron a ser utilizadas. Sorprende sin duda ver este enclave teniendo de fondo un paisaje tan bello con la playa de La Isla. Cuenta con varios paneles informativos.
Qué hacer
Colunga registra un número importante de huellas de dinosaurios de ahí que, para los amantes de los mismos y, sobre todo para los niños, resultará interesante y divertido visitar el MUJA, el Museo del Jurásico de Asturias, en la rasa de San Telmo, muy cerca de Lastres.
