Después de consolidar el Paraíso Natural, Asturias aspira ahora a promocionar de manera complementaria su "paraíso urbano", que no es otro que el triángulo que forman en el corazón del Principado sus tres grandes ciudades: Avilés, Gijón y Oviedo. Unos núcleos a menos de media hora entre sí y que concentran la mayor población regional y, por tanto, también el mayor número de servicios y oportunidades de ocio.
Poco a poco fuera de las fronteras comienza a hablarse del AMA, el Área Metropolitana Asturiana o, si se prefiere, Asturias Metropolitan Área. Se llame de una forma u otra, lo cierto es que la marca va por buen camino. Prueba de ello es que las agencias de viaje ofertan cada vez más escapadas urbanas al Principado con el gancho de sus tres principales urbes: gastronomía, arte, cultura, compras... Una propuesta que gana enteros progresivamente, más en este verano fresco y lluvioso que invita más al turismo de ciudad que a disfrutar de la costa o la montaña. Basta ver las calles ovetenses, por ejemplo, llenas de visitantes este agosto, una imagen impensable hace unos años. La idea crece y se desarrolla, además, más bien al margen del apoyo institucional, pues son los propios empresarios (hosteleros, artistas, diseñadores, pequeños hoteleros, tenderos...) los que han ido dando forma a ese "paraíso urbano" que nada tiene que envidiar al natural que, hoy por hoy, es la principal imagen turística asturiana. En líneas generales, de Avilés se destaca su oferta gastronómica, que ha tendido a una cocina de fusión con la aparición de unos cuantos restaurantes en esta línea, sin olvidar su buque cultural insignia, el Centro Niemeyer. Oviedo, la capital, centra su imagen en su abundante patrimonio artístico, con el Prerrománico a la cabeza, al tiempo que un buen número de tiendas de moda de diseñadores independientes y locales de música alternativos. La música -en verano, los principales conciertos se concentran aquí- es la bandera de Gijón, con el gran laboratorio artístico Laboral como santo y seña de un ambiente continuo los siete días de la semana en los meses de estío.
