Tiene Miren Iza, "Tulsa", una canción en su último trabajo dedicada a Bilbao, donde habla de cómo cambian las ciudades. Atesora ya en estos once años de canción de autor (antes fue riot grrrl getxotarra con "Electrobikinis") una buena colección de canciones vinculadas a la geografía, "buen truco para añadir imágenes a otras cosas", que incluye "Oviedo", en su primer trabajo,¡. Mañana vuelve, precisamente, a esta ciudad en la que estudió y empezó a componer- Será en La Salvaje, a las 22.30h dentro del ciclo Delicatessen que promociona, además, el Festival Ribeira Sacra.

El mundo no se acababa en esa habitación de la capital de provincias a la que cantaba entonces. Han pasado once años, una estancia de dos en Estados Unidos, varios discos y una evolución musical que ahora la aproxima más, en estudio, a la decoración electrónica, aunque hoy defenderá las canciones de "Centauros" con guitarra y casi en solitario.

Echando la vista atrás y comparándose con el presente, Miren dice que cuando componía cosas como "Oviedo", hacía las cosas de manera más automática. "Era muy inconsciente, no tenía oficio. Ahora, para bien o para mal hago las cosas con más conciencia de artesanía, y hay más barreras entre lo que yo siento y lo que al final se convierte en canción. Si lo hago bien, las canciones son más ricas, con una lectura más universal, no tan mía, de vómito. Hay más elaboración e incorporación de nuevos elementos. Lo más evidente son los instrumentos que utilizo, pero eso es lo más superficial".

Son epidérmicos, hasta cierto punto, los teclados y programaciones porque de hecho en esta gira regresa a las composiciones con guitarra y poco más. Ese volver a lo que la canción fue antes de entrar al estudio, dice, le está gustando. "Al principio no sabes lo que va a pasar, si te van a acompañar como una losa o van a ser ligeras. También me inquietó la grabación, por pensar que con más producción pierdes la esencia. Pero ahora me he tranquilizado mucho al ver que en la guitarra siguen exisitiendo".

La otra cara de la Tulsa de los sintetizadores es que han salido más festivales. "Teníamos el sambenito de que éramos un coñazo. Creo que hay mucho prejuicio con eso para las bandas nacionales, pero esta vez han salido cosas. Y en otra parte de la gira iré sola".

Poco queda ya de la Miren Iza del principio y sus miedos a la voz autoral, puede que sólo la resistencia a firmar con su nombre. Por otra parte, se ve "más cómoda". "Cumples años y te quitas miedos". Y acompañada. "La escena son los amigos. Me gusta sentirme acompañada, es más emocionante. Vivir esto aislada, en mi gruta, no me gustaría, no me atrae nada".