Las frutas y las verduras, si no son ecológicas, suelen traer muchas bacterias. Es un problema derivado del tipo de plantación y de la cantidad de pesticidas que se utilizan para que los insectos y otros animales no se coman las plantaciones.

Este tipo de sustancias son dañinas para nuestra salud, por lo que limpiar bien este tipo de alimentos antes de consumirlos es muy importante para no contraer ninguna enfermedad. Según los expertos americanos y los funcionarios federales de salud "estiman que cada año aproximadamente 48 millones de personas se enferman debido a un alimento contaminado con bacterias dañinas y muchas de las causas pueden sorprenderlo", escriben en su web.

"Aunque muchas personas saben que los productos animales deben manipularse cuidadosamente para evitar que se echen a perder, muchos no saben que las frutas y verduras también pueden ocasionar brotes de enfermedades transmitidas por alimentos. El año pasado, en los Estados Unidos hubo varios brotes de enfermedades causadas por frutas y verduras contaminados, incluyendo la espinaca, melones, tomates y lechuga".

Estos expertos nos aportan los siguientes consejos para que la fruta y la verdura quede totalmente limpia y comestible sin que pueda originar un perjuicio para nuestra salud:

  1. Lávese las manos por 20 segundos con agua tibia y jabón antes y después de preparar frutas y verduras frescas.
  2. Deseche toda parte dañada o golpeada antes de preparar y comer.
  3. Frote suavemente los alimentos mientras los enjuaga bajo un chorro de agua. No se necesita usar jabón o un producto para lavar productos frescos.
  4. Lave los productos frescos antes de pelarlos de manera que la suciedad y la bacteria no se transfieran del cuchillo a la fruta o el vegetal.
  5. Use una escobilla para limpiar las verduras y frutas duras tales como melones y pepinos.
  6. Seque las frutas y verduras con una toalla de tela o de papel para reducir la bacteria que aún esté presente.
  7. Deseche las hojas externas de las cabezas de lechuga o repollo.