Mejor climatología para trabajar en el exterior, días más largos y mucho tiempo libre si estamos de vacaciones son algunas de las ventajas de las que nos podemos aprovechar durante los meses de verano para realizar aquellas reformas y reparaciones que nos permitirán preparar la casa de cara al invierno y dejarla a punto para la llegada del frío.

Muchas son las mejoras que, con seguridad, todos tenemos en mente realizar. Disponer de un lugar acogedor donde pasar tiempo con familia y amigos es uno de los mayores placeres que se puede disfrutar en casa.

Ya sea en la terraza, patio o balcón, hay que elegir y colocar un suelo de madera en el exterior, dar vida a ese espacio con el mobiliario de exterior más adecuado a nuestras necesidades, ocuparnos de la iluminación adecuada y hacer una selección de plantas y flores que rematen ese espacio. Además, en algunos casos será necesario colocar un toldo que evite la entrada de calor sin quitar luminosidad al interior. La gama de toldos que hay en el mercado permite escoger entre una amplia variedad de colores y medidas.

Por último, un cerramiento, en el caso de las terrazas, dará intimidad a la vez que contribuirá a dar carácter. Existen multitud de opciones, desde madera hasta brezo, pasando por piedra o metal. Otra posibilidad es ampliar la casa cerrando la terraza, ganando unos metros para el salón o el comedor, hay que planificar este espacio y decidir la carpintería exterior y el cristal que colocaremos. Si se dispone de jardín, crear un pequeño «longe» o salita de estar exterior supondrá disponer de más espacio para disfrutar.

Además, en estos días también c

El mantenimiento de los suelos de azulejos en el exterior, pintar la fachada o limpiar y reparar ventanas y persianas son algunas tareas. Quitar el gotelé de las paredes, en caso de que estemos cansados de esta tendencia de los 80, es uno de los trabajos más realizados. Además se puede aprovechar para aislar esas paredes térmica y acústicamente, con lo que se conseguirá un hogar mucho más eficiente y lo notaremos en las facturas de cada mes.

Cocinas y baños

Dos de los espacios que habitualmente más se reforman son las cocinas y baños, en ocasiones un simple lavado de carra y en otras con más profundidad. En cuanto a los baños, con un poco de buen gusto y algo de presupuesto podemos hacer que parezcan nuevos con una simple reforma.

Algo muy básico que podemos cambiar es el revestimiento o pintura de las paredes. Cambiar la puerta de acceso nos permitirá, gracias a las puertas correderas, además de darle un aire nuevo ganar algo de espacio.

Una buena idea, una vez metidos en faena, es sustituir la ventana de este espacio por un modelo más eficiente y aislante que nos permita ahorrar. También es aconsejable decantarse por los modelos de sanitarios y griferías que permiten ahorrar agua.

Un problema común es que las cocinas son muy pequeñas o estrechas y no suelen aprovechar bien el espacio. Es recomendable tener una distribución perimétrica, todo el mobiliario debe estar en las paredes o pegado a ellas y dejando el centro libre, se puede hacer utilizando las cuatro paredes o lo que se denomina en «L», dejando dos libres. En cuanto a los muebles es importante cambiar las puertas opacas por unas de cristal transparente o translúcido, sensación de más amplitud.