El truco para que tu lavadora vuelva a oler como nueva y funcione como el primer día

Si lo haces podrás volver a poner la colada sin problemas

La lavadora es uno de los electrodomésticos que más tenemos que cuidar. No en vano nuestra colada y la ropa que más nos gusta ponernos depende de que funcione correctamente. En no pocas ocasiones aunque este electrodoméstico no esté estropeado genera muy malos olores y nos da la sensación de que la ropa no sale del todo limpia. Da igual las veces que la laves. El mal olor es especialmente desagradable según van pasando los días. Entonces ¿cómo podemos solucionarlo? Hemos preguntado a los expertos en limpieza y lo tienen claro. Basta con un sencillo truco que puedes aplicar en una sola noche para que tu lavadora esté como nueva.

La técnica es sencilla. Empapa dos bayetas con un poco de lejía. Ten en cuenta en este punto que estás tratando con un producto muy tóxico por lo que si tienes animales o niños pequeños en casa controla que durante las horas que apliques este remedio.

Una vez que tengas las bayetas mojadas déjalas encima de las gomas de la lavadora durante toda la noche. Al día siguiente retira las bayetas y mete un poco de vinagre de limpieza en el lugar del suavizante. Haz un lavado largo con agua caliente y la lavadora vacía para evitar que queden restos de lejía. Y ya está.

Ten en cuenta que es muy importante siempre y en todo momento que cuides la lavadora. Es uno de los electrodomésticos más caros que puedes encontrar. Los técnicos en este tipo de electrodomésticos tienen claro que hay un error por encima de todos que hay que evitar: el de cargar en exceso el tambor de este electrodoméstico. Y es que ese error es lo que hace que las lavadoras se estropeen.

Recuerda que en nuestra sección de Decoración puedes encontrar a diario todos los trucos de limpieza que debes conocer para que la limpieza diaria no sea una tortura. Recuerda que con los consejos de los expertos en limpieza siempre puedes hacer que pasar la mopa sea algo más agradable. No hace falta gastarse mucho dinero ni invertir mucho tiempo en el cuidado de tu vivienda para que los resultados sean siempre los esperados. Sólo hace falta saber hacer bien la limpieza. Y, como no, tener un poco de paciencia.