Cinco cosas que no deberías tener en casa para tenerla siempre limpia

Hay ciertos artículos que tenemos en nuestro hogar cuya limpieza exige esfuerzo y tiempo

G. T.

El 'nesting', o anidar el hogar, está más de moda que nunca. La necesidad de vivir en una estancia confortable y limpia invita a pasar más horas en casa, cocinando, ordenando, organizando cenas con los amigos, jugando con los niños, o simplemente no haciendo nada.

Esta tendencia que procede de los países nórdicos, los más felices del mundo según las Naciones Unidas, se está extendiendo por Europa. Su lema reza que para acomodar nuestra casa y sentirnos como polluelos en el nido, debemos convertir nuestro lar en un lugar bonito, limpio y cómodo. Un sitio que invite a estar, a relajarse y a disfrutar.

Pero, ¿a quién le sobra el tiempo entre semana? Seguramente, es el bien más preciado de nuestros días. Por esta razón, en el proceso de tener la casa a punto y limpia, podemos evitar ciertos artículos que acumulan siempre suciedad y en los que hay que invertir tiempo y esfuerzo, del que a veces no disponemos.

Alfombra de pelos

Son preciosas, calentitas, acogedoras... Pero acumulan una gran cantidad de gérmenes y suciedad. Mantener la higiene de la alfombra de pelos se complica cuando tenemos animales domésticos en casa, o niños pequeños.

Las alfombras de pelo largo son muy bonitas pero acumulan mucha suciedad. Foto: Ikea

Pasar la aspiradora y sacudir la alfombra de forma regular se convierten en tareas obligatorias, cuyo resultado no dura demasiado tiempo. Una opción elegante y más limpia es adquirir una alfombra de vinilo que se puede fregar y resulta de lo más cómoda.

Mampara de la ducha

Una mampara, reluciente y brillante, invita a una buena ducha para relajarse. ¿Pero quién logra que su mampara siempre esté lustrosa? Es habitual que durante la semana se acumulen los restos de jabón y manchas de agua que deslucen su aspecto.

Si no quieres estar pendiente de su limpieza, casi diaria, puedes optar por una cortina de ducha. Las hay de lo más divertidas y llamativas, y sobre todo, se pueden meter en la lavadora para que no acumulen manchas indeseables.

Cesto de la ropa sucia

Tener un cesto de la ropa sucia es imprescindible porque evita que las prendas estén desperdigadas por las habitaciones o sumen polvo en una silla. Sin embargo, el cesto acumula una gran cantidad de bacterias provenientes de la ropa sudada, con manchas, restos de comida...

Si tienes una cesta de mimbre, colócale una funda de ropa para poder lavarla con la colada. Otra opción es también la de una cesta de tela para que su limpieza sea más fácil. Fotos: Zara Home

Una manera de combatir esa mugre invisible es poner una funda de tela en el cesto de la ropa sucia y lavarla frecuentemente junto con la colada.

Tabla de madera para cortar

Aunque a veces parezca que no se ensucian, los microbios y los hongos se acumulan en estas tablas cada vez que las utilizas para cortar comida. Por eso mismo, después de preparar los alimentos sobre ellas deberás limpiarlas sumergiéndolas durante algunos minutos en una solución de agua con vinagre.

Las tablas de cortar de otros materiales también necesitan desinfectarse de vez en cuando aplicando sobre ellas una mezcla de bicarbonato de sodio y agua.

Muebles negros

Los muebles negros o wengué son elegantes, sobrios, atemporales... pero atraen el polvo como el néctar a las abejas. Para que luzcan siempre brillantes, sería necesario pasar un paño de microfibra para atrapar el polvo en lugar de moverlo por los alrededores.

Los muebles wengué necesitan un mantenimiento diario para no acumular polvo. Foto: Ikea

Otra opción, es poner una tabla de madera blanca encima de los muebles, algo que prolongará su limpieza.

Con todos estos consejos, puede que sea más fácil mantener la higiene de tu hogar y que quedarse en casa para disfrutarla plenamente se convierta en todo un planazo.