El papel pintado, ese gran olvidado de la decoración, resurge cada vez con más fuerza como alternativa a la clásica pintura de pared. Gracias al papel pintado podemos crear espacios diferenciadores y con mucha personalidad. Las nuevas tecnologías han abierto un gran abanico de texturas y calidad en esta técnica. Esa es una de las ventajas del papel pintado que te listamos a continuación.

1. Gran variedad

Una de las principales ventajas es que el papel pintado admite infinidad de colores, diseños y combinaciones. Con las nuevas tecnologías la calidad de las impresiones ha crecido enormemente, pudiendo llegar a imprimir fotografías que nosotros elijamos para empapelar una pared, los llamados fotomurales. Puedes elegir por un papel más liso para utilizarlo por toda la habitación o uno con más colores y diseños artísticos para usarlo sólo en una pared.

2. Fácil de aplicar

Aunque pueda parecer lo contrario, colocar el papel pintado es muy sencillo y cualquiera puede hacerlo. A diferencia de la pintura tradicional, que harían falta al menos dos capas para que la pared quedase perfecta, con el papel pintado solo necesitamos una pasada para dejarlo impecable. Eso sí, colocándolo con cuidado para que no queden bolsas de aire por debajo.

Los fotomurales son tendencia gracias al papel pintado. (Getty Images)

3. Resistencia

La resistencia del papel pintado siempre es superior a la de la pintura estándar que utilizamos en nuestras habitaciones. Con el tiempo es normal que la pintura de las paredes se despegue en ciertos puntos por algún que otro golpe. Sin embargo, el papel pintado es más resistente al tiempo y aguantará hasta que tú decidas quitarlo.

4. Fácil de limpiar

A diferencia de la pintura normal, el papel pintado se puede limpiar fácilmente. Aunque antes de nada hay que leer las instrucciones del fabricante, la gran mayoría de los papeles pintados se puede limpiar perfectamente con una esponja humedecida ligeramente con agua templada y un poco de jabón.

5. Tapar imperfectos

Además del tema de la suciedad, otra de las ventajas del papel pintado es que nos permite tapar imperfecciones en la pared que no podríamos cubrir con la pintura normal. Los bultos o los agujeros que puedan existir quedarán cubiertos con el papel pintado y se notarán mucho menos que si hubiésemos dado una o dos capas de pintura.