Planchar no es ciertamente una de las actividades favoritas de la mayoría de los italianos. Pero la satisfacción de tener las sábanas, las toallas, las camisas y la ropa siempre en orden nos lleva a hacer este sacrificio y a encender la plancha incluso cuando preferiríamos relajarnos en el sofá. Pero mucha gente no sabe que hay una manera de hacer que el planchado sea aún más satisfactorio. Además de hacer que nuestra ropa luzca mejor, podemos aprovechar esta actividad para que huela aún mejor. Basta con aplicar un viejo truco de la abuela que recientemente se ha vuelto a popularizar.
Estamos hablando de tipos de tejidos específicos, que no pueden presentarse con pliegues y arrugas. Esto nos haría parecer desaliñados y descuidados. Entonces, ¿cómo podemos planchar camisas, pantalones y vestidos a la perfección perdiendo sólo 2 minutos de nuestro tiempo para cada uno?
Con este truco podremos reducir drásticamente el tiempo dedicado a esta actividad con fantásticos resultados. Así que es hora de aprenderlo. Al mismo tiempo, recordemos también los consejos sobre cómo planchar perfectamente las mangas de las camisas.
Planchar una camisa puede llevar mucho tiempo, especialmente para quienes no están familiarizados con la plancha. En realidad, lo que realmente cuenta es el tipo de tejido. Hay algunos materiales que son difíciles de planchar y basta un error para arruinarlos. Por eso debemos leer primero la información de la etiqueta.
El rayón, el acetato, la seda y el acrílico deben plancharse aún húmedos y siempre del revés. Para estar aún más seguro, es mejor colocar un trozo de lino entre la prenda y la plancha. Lo mismo ocurre con el nylon y el poliéster. Además, hay que prestar mucha atención a las costuras, que no deben estar aplastadas.
El segundo consejo es utilizar la plancha a una temperatura media, pero con el vapor encendido. Esto le permitirá tener una buena potencia pero sin el riesgo de crear halos. Una vez tomadas todas estas precauciones, es el momento de poner en práctica nuestra técnica.
Los expertos en el arte del planchado se han dado cuenta de dos cosas. La primera es que al utilizar más presión inmediatamente después de pulsar el botón de vapor se eliminan las arrugas profundas en una sola pasada. La segunda es que pasar la plancha en movimientos circulares aumenta la eficacia del planchado. Así que el truco consiste en crear pequeños círculos con la plancha mientras se plancha sobre la tela. En unos minutos habremos superado la prueba y el vestido estará listo para ser usado.
