Todos lo hemos notado alguna vez. Una de las sensaciones más molestas que se pueden experimentar en la cocina es la de abrir la puerta de un armario o cualquier compartimento de madera y ver pequeños animales voladores deambulando alegremente entre los envases de nuestros alimentos. En la jerga se les llama polillas, y se sabe que se extienden y se instalan especialmente en los cereales y alimentos de origen orgánico: harina, galletas, frutos secos, paquetes de pasta. El enemigo es a menudo invisible, así que tenemos que inventar algo.

Afortunadamente, la química y un poco de experiencia empírica de nuestras abuelas, como suele ocurrir en la cocina, vienen en nuestra ayuda. Las soluciones de bricolaje suelen resolver muchos problemas. Hace poco vimos que este mismo zumo de frutas es fenomenal para marinar la carne gracias a una enzima llamada bromelina. Al igual que conocemos los poderosos efectos de los posos del café para nutrir la tierra. Hoy utilizamos un remedio casi totalmente gratuito para mantener las polillas y mariposas de la comida fuera de la cocina.

Una mezcla aromática

Muchas personas utilizan cintas adhesivas con feromonas. Las polillas de la comida son atraídas por el olor y se instalan en él, atrapándolas. Pero puede que no apreciemos la visión de estos animales atascados miserablemente en la superficie de la puerta. Así que vamos a probar un remedio natural avalado por las abuelas que debería prevenir el problema de raíz. De hecho, las naranjas y los clavos desprenden un aroma penetrante que es un efecto antipolilla natural.

Un espacio pequeño, como una estantería o la puerta de un armario, es ideal para esta aplicación. Podemos combinar el efecto de los dos aromas naturales de la siguiente manera: cortar una arandela de naranja e introducir un clavo por cada dos gajos de naranja. O, aún más eficaz, utilizamos la superficie de la cáscara de naranja seca y colocamos los clavos en su interior. A continuación, dejamos que actúe con el tiempo.

Para mantener las polillas de la comida y las polillas fuera de nuestros armarios, sólo necesitamos este remedio natural y barato que todos tenemos en casa.

Esto se suma al conocido remedio de utilizar hojas de laurel y esparcirlas por la cocina. Sea cual sea el método que prefiramos, recordemos que los pequeños huevos de las polillas son un gran problema. A menudo se esconden en las grietas menos visibles de la madera. Por eso su reaparición es tan constante y continua. Por lo tanto, mantenga siempre el envase bien cerrado y limpie los compartimentos con regularidad.