Con la llegada del buen tiempo, por fin estamos preparados para abrir las ventanas y disfrutar de la belleza de las plantas de nuestros jardines y terrazas. Sin embargo, a veces mantener las ventanas o las puertas abiertas puede provocar la entrada de invitados no deseados en la casa. Además de las hormigas, las moscas son uno de los insectos más molestos. Las moscas pertenecen a la categoría de los dípteros y hay muchas especies diferentes. Entre las más cercanas a nosotros están sin duda las moscas domésticas. Quién sabe cuántas veces nuestros momentos de relax se han visto perturbados por su zumbido, especialmente en verano. Además de ser irritantes, estos insectos pueden ser peligrosos para la salud. De hecho, son vehículos para la propagación de muchos agentes patógenos que tienen dentro o en su cuerpo.

Sus cuerpos albergan microbios y bacterias al asentarse y alimentarse de alimentos en descomposición o residuos orgánicos. Ver una o dos moscas en la casa no indica necesariamente una infestación de moscas, pero lo importante es que no pongan huevos. Sin embargo, ver moscas por la casa y alrededor de nuestra comida no es precisamente una escena agradable. Sobre todo si se piensa en las sustancias de las que se alimentan o con las que están en contacto constante.

Por término medio, una mosca doméstica vive unos 30 días y se siente atraída por los residuos orgánicos en descomposición, como la carne. Mientras que las moscas de la fruta se sienten atraídas por las sustancias azucaradas, alimentándose de fruta madura y bebidas azucaradas. Las temperaturas cálidas también favorecen su crecimiento. Si tiene demasiadas moscas en su casa, no es necesariamente por falta de higiene, sino que la causa podría ser un ambiente cálido y húmedo. Estos entornos son ideales para la proliferación de estos insectos, que pueden poner hasta 600 huevos a lo largo de su ciclo vital. El ciclo de vida dura unos 10 días.

Evitar su presencia en nuestras casas es muy difícil, sobre todo si mantenemos las ventanas abiertas. Pero es muy importante ahuyentarlas y evitar que pongan huevos para no correr el riesgo de una infestación. Por lo tanto, es necesario, en primer lugar, evitar que queden restos de comida o bebidas dulces abiertas. A la hora de tirar las botellas o los envases, sería conveniente enjuagarlos sin dejar sustancias azucaradas, a las que se sienten muy atraídas. También es importante utilizar mosquiteras. Por último, una solución natural podría ser colocar plantas aromáticas o aceite esencial de albahaca en los alféizares de las ventanas. Como alternativa, además de los aerosoles químicos, puedes comprar en el mercado lámparas contra moscas y mosquitos.