Cada día nuestra vida en casa está marcada por actividades muy concretas. Utilizamos muchas habitaciones, pero principalmente 2.

El baño y la cocina, de hecho, son las habitaciones más frecuentadas de la casa y más propensas a ensuciarse. Por eso, a menudo buscamos en las tiendas muchos tipos de detergente para que nuestro hogar esté limpio y acogedor.

El polvo, la grasa, la cal y mucho más son los enemigos contra los que tenemos que luchar cada día. Nuestras armas son los paños, las aspiradoras, las fregonas y varios tipos de productos.

Queriendo ahorrar dinero y tratando de limitar el impacto medioambiental con unos pocos ingredientes, podemos probar algunos métodos sencillos para eliminar la cal.

Algunos remedios caseros

Esa odiosa y antiestética pátina que cubre grifos y accesorios es la cal. El agua que suele llegar a casa no es pura, sino que contiene minerales, entre ellos la calcita. Al evaporarse, deja granos de estos elementos y nos corresponde eliminarlos.

Entre los remedios caseros contra la cal, hay uno en particular. Debemos poner la piel de 2 o 3 manzanas en un bol y cubrirlas con agua caliente. Añade una cucharada de sal, remueve y empapa la regadera. Lávelo después de 20 minutos. Para los grifos u otras partes, basta con utilizar ese líquido con almohadillas de algodón y aplicarlas en la zona a tratar. Aclarar después de 15 a 20 minutos.

Si por casualidad notamos algo de óxido, aplicamos almohadillas de cebolla empapadas en Cola y cubrimos con papel de aluminio. Déjalo durante 10 minutos y luego lava la pieza.

Para dar a nuestros grifos y accesorios un ligero lavado, basta con combinar los posos del café con un poco de sal. Frotamos la crema con una esponja y luego aclaramos. También puedes frotar un poco de sal fina, mezclada con zumo de limón, como alternativa al habitual vinagre y bicarbonato de sodio.

Un aerosol eficaz podría ser el que se hace disolviendo 100 g de ácido cítrico en 400 ml de agua destilada en una botella pulverizadora. Añada 10 ml de detergente lavavajillas ecológico concentrado y tendrá un eliminador de cal para inodoros, duchas, fregaderos y grifos. También podemos probarlo en la cocina. Evitar su uso en encimeras de mármol y piedra.

Finalmente, en casa, podemos preparar la piedra de arcilla. Consigue arcilla blanca en la herboristería y pesa 200 g. Añade 2 cucharadas de bicarbonato de sodio, 1 cucharada de sal, 170 ml de detergente lavavajillas ecológico y mezcla hasta obtener una especie de crema. Para darle un agradable aroma, podemos añadir 10 gotas de aceite esencial al gusto.

Giriamo bene il composto e mettiamo la ciotola da parte. Dopo 3 giorni potremo utilizzare la pietra d’argilla ormai secca. Basterà inumidire una spugnetta, passarla sull’impasto e poi pulire le zone con i depositi di calcare. Va bene sia in bagno che in cucina e può pulire anche parti unte del piano cottura.