El truco definitivo para limpiar la vitrocerámica de inducción

No te creerás lo fácil que sale la suciedad

Una cocina.

Una cocina. / Pexels

Benito Domínguez

Si tienes una cocina de inducción sabrás que no se puede utilizar como las vitrocerámicas normales, ya que no se calientan al tacto. Esto también es un impedimento a la hora de limpiarla, ya que todo el mundo sabe que la mejor forma de limpiar la vitrocerámica es encenderla un poco para que el calor disuelva parte de la suciedad y sea más fácil eliminarla. Pero hay un truco que de verdad funciona para limpiar este tipo de vitrocerámicas.

Las placas de inducción son un tipo de tecnología de cocción que se utiliza en los hogares y en los restaurantes. En lugar de calentar directamente la comida, las placas de inducción generan un campo magnético que produce calor en los recipientes de metal compatibles. Esto significa que la superficie de la placa de inducción nunca se calienta, lo que la hace más segura y eficiente que otros tipos de superficies de cocción.

Las placas de inducción también son más eficientes que otros tipos de superficies de cocción, ya que el calor se produce directamente en el recipiente de metal y no se pierde en el aire o en la superficie de la placa. Esto significa que se puede cocinar más rápidamente y con menos energía. Además, la superficie de la placa de inducción es fácil de limpiar, ya que el calor se produce en el recipiente y no en la superficie de la placa.

Ventajas

Otra ventaja de las placas de inducción es su precisión de control de temperatura. Con una placa de inducción, es posible controlar con precisión la temperatura de cocción, lo que es ideal para cocinar alimentos delicados como pescados y huevos. También es posible ajustar la temperatura de forma rápida y precisa, lo que significa que es posible pasar de una cocción lenta a una cocción rápida en un instante.

Sin embargo, hay algunos aspectos negativos a tener en cuenta con las placas de inducción. Por ejemplo, necesitan recipientes de metal compatibles para funcionar correctamente, lo que significa que no se pueden utilizar recipientes de vidrio o aluminio. También pueden ser más costosas que otros tipos de superficies de cocción.

Pues para limpiar las vitrocerámicas de inducción no hay nada mejor que el vinagre de limpieza. Así que echa un chorrito encima de la vitrocerámica y con un papel de cocina unta el vinagre por toda la vitrocerámica. Es necesario que dejes actuar al vinagre de limpieza durante un tiempo porque si no este truco no servirá para nada.

Una vez que haya reposado, pásale un trapo de microfibra y verás como se lleva toda la suciedad, es casi mágico.