Poner papel higiénico en los zapatos: el secreto que cada vez copia más gente (y tiene todo el sentido)

Meter papel higiénico con vinagre: el secreto efectivo que cada vez hace más gente

A.D.

M. R.

La maravillosa sensación que tenemos después de ducharnos es indescriptible, nos sentimos frescos y perfumados y nuestra piel huele fabulosamente. Nos gustaría tener ese buen olor el mayor tiempo posible, pero a menudo no es así, sobre todo después de largas jornadas de trabajo o de tareas domésticas. A veces puede depender de los alimentos y bebidas que consumimos, de la flora bacteriana o de los malos hábitos. Es normal sudar incluso después de una actividad física intensa, pero desde luego si utilizamos materiales sintéticos en contacto con la epidermis, empeoramos la situación. La sudoración de los pies también puede incomodarnos, provocando un hedor desagradable, que puede estropear el calzado que llevamos. Además del tipo de calcetines que elijamos, la sudoración excesiva, la bromhidrosis, puede depender de varios factores, como la falta de higiene, la hiperhidrosis, los zapatos no transpirables y la temperatura exterior.

Para eliminar el mal olor del calzado no basta con elegir los de mejor calidad, si nuestros pies producen mucho sudor podemos intervenir con algunos remedios. Un truco es el uso de almidón de maíz o polvos de talco para atrapar el mal olor de los zapatos.

Basta con espolvorearlo dentro del zapato por la noche y retirarlo sólo a la mañana siguiente. Otra posibilidad es utilizar el mismo procedimiento pero empleando bicarbonato de sodio, un ingrediente versátil que seguramente tendremos en casa. Otra solución sería el vinagre, que frotaremos sobre la superficie interior con la ayuda de un paño limpio, un remedio que también es útil para eliminar la suciedad. Sin coste alguno podríamos reciclar las cáscaras de los cítricos, bien secas, para introducirlas en el interior de los zapatos, quizás cuando los guardemos en el armario zapatero. Para decir adiós a los pies apestosos y al mal olor de los zapatos, podríamos echar unas gotas de aceites esenciales en la plantilla.

Otro truco tiene que ver con el papel higiénico, un elemento que se ha convertido en un aliado fundamental en el hogar. Si tus zapatos están húmedos después de un día de lluvia, el papel higiénico puede ser una solución rápida. Coloca un trozo de papel higiénico en el interior de cada zapato para absorber la humedad. Deja el papel higiénico dentro durante unas horas y luego retíralo.

Poner sal en los zapatos

Entre los productos naturales más eficaces para eliminar los malos olores están el almidón de maíz y la sal. Si se usan juntos, basta una pequeña cantidad para absorber la humedad y los malos olores. Muchas personas también utilizan estos productos en cajones y armarios para combatir el moho y la humedad.

Una vez eliminados los malos olores, podemos dar a nuestros zapatos un agradable aroma a limpio utilizando un producto natural muy valioso. Hablamos del aceite del árbol del té, un producto que elimina el mal olor y funciona como antibacteriano natural. Sigue leyendo si quieres saber cómo proceder.

Lo único que tienes que hacer es combinar una cucharada de maicena, otra de sal y 8 gotas de aceite del árbol del té. Mézclalo todo con una cucharilla y añade un puñado a un pañuelo de algodón. Cierra el pañuelo con una goma elástica y mételo dentro del zapato o zapatilla maloliente. Sólo tardarás 5 minutos en solucionar el problema de los zapatos y zapatillas malolientes.

Ahora, simplemente retire el pañuelo de los zapatos y póngase el calzado maloliente. Con este método, no tendrá que perder tiempo cepillando los restos de almidón de maíz y sal. De hecho, las suelas de tus zapatos no se ensuciarán porque todo permanecerá encerrado en el pañuelo.