Eliana Sánchez interpreta con éxito uno de los papeles principales de la serie "Águila Roja", cuya caracterización exige horas de maquillaje y portar con un vestido de veinte kilos

Eliana Sánchez es la actriz asturiana que encarna con éxito a Mariana de Austria en la serie "Águila Roja". Nacida en Gijón, aunque criada en Mieres en el seno de una familia minera, llegó a la pantalla de la mano de su paisano, Luis San Narciso, que fue el que vio en ella un potencial estupendo para meterse en la piel de un reina. Y no se equivocó. Eliana Sánchez ha logrado ser uno de los personajes más queridos de la serie, y cuenta con el apoyo de la crítica y de los fieles seguidores de esta serie, sin duda una de las más exitosas del momento.

Humilde y trabajadora, la actriz asturiana está saboreando a bocaditos pequeños este éxito con el que reconoce que no contaba. Instalada ahora en Madrid, el viaje desde Asturias a la capital se le hizo necesario para poder despegar en el mundo de la interpretación, una vocación que cultiva desde pequeña ya que, como ella misma reconoce "ya desde niña estaba metida en todos los saraos y en Navidades cogía a mis primas y montaba bailes y representaciones para una espectadora, mi abuela. Mi primer contacto serio con la interpretación fue en Mieres, con una grupo de teatro amateur y a partir de ahí se alimentó la necesidad de formarme y continuar". Su personaje es poliédrico, complejo y además está perfectamente caracterizado. Para meterse en la piel de Mariana de Austria, Eliana Sánchez se somete cada día a dos horas de maquillaje y además se embute dentro de un corsé y de un vestido que pesa más de veinte kilos. "A llevar este peso encima nunca te acostumbras, y no creo que merezca la pena el sufrimiento de meterse en un corsé para verse más esbelta. Viva Cocó Chanel y sus pantalones".

Además de actriz, Eliana Sánchez es coach, su segunda pasión es la docencia. "Uno no puede parcelar las cosas de la vida, todo son intersecciones, como en los diagramas de conjuntos. La vida es larga y compleja y uno no debe limitarse ni etiquetarse, ni dejar que nadie lo haga? también he ejercido de fisioterapeuta. En el caso de los actores a veces hay que trabajar en otras cosas para poder mantenerse. Woody Allen decía que si eres actor ¿en qué bares has trabajado?".

A Mariana de Austria su marido le es infiel, y para Eliana Sánchez lo realmente importante "es la lealtad, que está por encima de la fidelidad, pero hay que perdonar siempre, lleve el tiempo que lleve, aunque sea para pasar página de la forma más sana posible". Desde su papel de reina, la actriz asturiana muestra sin tapujos sus reticencias hacía la actual monarquía española. "Es una institución revisable, anclada en otros tiempos. La sociedad va por delante de sus instituciones en muchos aspectos". Pero a ella el papel de reina y su impecable interpretación le quedan perfectos, y poco tienen que cuestionar, el papel ha ido ganado peso a medida que la serie avanza. "Han confiado en mí, han ido definiendo al personaje y desarrollando tramas e imagino que algo tienen que ver con mi trabajo", asegura Sánchez, ella que todavía nunca ha recibido una llamada para ofrecerle un papel. "Eso está solo reservado para unos pocos, el resto llamamos, nos movemos, solos o con representantes y si tienes la suerte de hacer una prueba entonces sí que puede que tu teléfono suene", explica. La profesión de actor, tan vocacional, tiene también su parte oscura. "Nunca lo puedes dar todo por hecho. Cada proyecto es un partir de cero", asegura la asturiana.

A pocos días de las fiestas navideñas, Eliana Sánchez ya está en el tiempo de descuento para volver a Asturias, donde está su madre, la familia, las amigas?", mi gente, el mar, el verde. A veces, en momentos de fatiga, se echa de menos la vida apacible, sencilla, segura. Pero mi espíritu inquieto se impone y Madrid es una fuente inagotable de intercambios, de formación y experiencia", reconoce la asturiana. Meterse a trabajar con un más que consagrado elenco de actores, le ha servido para "obligarme a crecer". Y ella tiene la suerte de ponerse grandes retos en lo profesional a largo plazo, porque esta es una manera de asumir mejor el fracaso si a este le da por mostrar su cara. "Solo quiero seguir siendo feliz con lo que hago, y cuando no lo sea, media vuelta y otra cosa", afirma. La reina asturiana de las pantallas analiza el papel de la princesa Letizia, asturiana como ella, y explica que aunque no se atreve a dar consejos y lo suyo con la monarquía no es más que pura ficción, "de lo que sí estoy segura es que dejando la Corona aparte, no se diferencia del resto de reinas, que somos todas". Aunque a Eliana Sánchez no le gusta lo de marcarse grandes retos profesionales a largo plazo sí que reconoce que merece la pena luchar por los sueños, "y es que como dijo Eduardo Galeano, la utopía está en el horizonte. Camino dos pasos, ella se aleja dos pasos, y el horizonte, diez más allá. Entonces ¿para qué sirve la utopía?, pues eso, para caminar", resalta.

De momento, su proyecto de felicidad se centra en seguir disfrutando de Madrid, de su familia, de la tranquilidad, del olor de su madre y de intentar comerse las doce uvas sin atragantarse. "Siempre pido volver a tomármelas el mismo año con la misma gente, y luego pido otra cosa que no se puede contar. Que la gente no piense mal? o sí, el pensamiento es libre", dice la actriz asturiana. Quizás que el vestido de Mariana de Austria pese un poquito menos es su tercer deseo. ¿Quién sabe?