N.R.
Tal vez el nombre de William Levy nos les diga nada ahora mismo a muchos de ustedes pero tomen nota de él porque pronto lo van a tener hasta en la sopa. En primer lugar, una aclaración: es cubano nacionalizado estadounidense. Y no un jovencito precisamente: tiene 34 años. Y está preparado para dar la campanada con el estreno de la película erótica "Addicted", con la que aspira a convertirse en el sucesor de sus admirados Brad Pitt y Tom Cruise, ya cincuentones.
Pero no sólo le veremos en esta calenturienta propuesta. A lo largo de los próximos meses pondremos a prueba su versatilidad con la comedia "A change of heart", la película de acción "The veil" y el policiaco "Term life". Nada más y nada menos.
"Me gusta mucho lo que han hecho con sus carreras Tom Cruise y Brad Pitt. Pitt ha hecho cosas muy diferentes, de un personaje de loco, de bobo, a uno de guerra. Me encantaría tener una carrera en la que pueda explorar muchos personajes", ha dicho en una entrevista Levy, quien en "Addicted" interpreta a un artista que inicia una obsesiva relación sexual con una mujer. Con semejante argumento no es de extrañar que la película vibre a tope con un suculento surtido de escenas de alto voltaje erótico que obligaron al actor a prescindir del vestuario en buena parte del metraje. Eso sí, Levy lo justifica por la historia: "Siempre es un poquito incómodo, pero tuvimos una atmósfera muy familiar en el set. Todos nos sentimos muy bien, salimos la noche anterior, hablamos, comunicamos nuestras inquietudes a la hora de filmarlas y al final yo creo que se logró una química muy linda", indicó. Levy es padre Christopher y Kailey Alexandra, de 8 y 4 años, fruto de su relación con la actriz de telenovelas Elizabeth Gutiérrez, nacida en Los Ángeles pero de raíces mexicanas. Levy empezó su carrera como modelo y actor en telenovelas como "Olvidarte jamás" y "Acorralada". También fue finalista del concurso de baile "Dancing with the stars". En 2012 fue elegido el "hombre más sexy" por la revista "People" en español.
