Un Godzilla gigante hecho con 50 toneladas de arena es el nuevo inquilino de un céntrico parque de Tokio, en lo que supone un nuevo homenaje de la capital nipona al monstruo radiactivo, nombrado uno de sus embajadores turísticos.

La efigie, de 3,6 metros de altura, instalada esta semana en el parque de Shinjuku, es obra del escultor Toshihiko Hosaka. La figura representa la cabeza del monstruo radiactivo hasta la mandíbula superior con todo lujo de detalles, incluidos unos dientes fieros.