El cantante canadiense Michael Bublé y su mujer, la actriz y modelo argentina Luisana Lopilato, están "devastados" por el reciente diagnóstico de cáncer de su hijo mayor, de tres años. Por ello han anunciaron la suspensión temporal de su actividad profesional para dedicarse a luchar por su salud del pequeño.

La pareja pidió a sus seguidores, en un comunicado a través de las redes sociales, que en "este difícil momento" recen por Noah, que se encuentra actualmente en tratamiento en los Estados Unidos, y que "por favor respeten" la privacidad de la familia.

"Tenemos un camino largo por delante y esperamos que con el apoyo de nuestra familia, amigos, fans alrededor del mundo y nuestra fe en Dios, podamos ganar esta batalla", señalaron Bublé y su esposa.

Noah es el hijo mayor de los dos artistas, nacido en agosto de 2013, y son también padres de Elías, que llegó al mundo el 22 de enero pasado. Noah,según su madre, guarda una gran parecido con Michael Bublé y también tiene aficiones musicales.

"Siempre hemos hablado mucho sobre la importancia de la familia y el amor que tenemos por nuestros hijos. Luisana y yo vamos a dedicarle todo nuestro tiempo y atención a ayudar a Noah a ponerse mejor, suspendiendo nuestras actividades profesionales por ahora", añaden en su comunicado. Bublé, de 41 años, y Lopilato, de 29, se casaron en abril de 2011 con una enorme fiesta en una fastuosa residencia de Buenos Aires a la que asistieron unos 300 invitados.

El pequeño deberá enfrentar un tratamiento en Estados Unidos que durará cinco meses, y por tal motivo la familia de la actriz se mudará a ese país, para apoyarlo y estar juntos. El niño estuvo internado el año pasado en el Hospital Alemán, después de que se le cayera una taza de agua caliente en su brazo derecho. El pequeño sufrió el accidente mientras estaba en compañía de Luisana y la niñera en la casa que la pareja tiene en Nordelta.

Bublé y Lopilato se conocieron en noviembre del 2008, cuando el canadiense acudió a presentarse en el Gran Rex. Su preocupación por los hijos siempre ha sido evidente. "Los dos somos padres muy presentes, organizamos mucho ambas agendas para turnarnos temporadas en las que cada uno pueda ocuparse más de la casa. Es muy difícil, pero lo hacemos. Mike me conoció haciendo esto y si no lo hiciera él sabe que no sería una mujer completamente feliz. Casarme y tener hijos también fue una elección pero no quiero dejar aparte mi profesión", dijo Luisana en una entrevista al diario argentino "Clarín".